Las lesiones, un condicionante grave para el Betis

Las lesiones están golpeando con dureza al Real Betis esta temporada. Sin ir más lejos, Pellegrini afrontaba el duelo frente al Atlético sin Juanmi, su máximo goleador el pasado curso, y habiendo pactado un máximo de 20 minutos para Nabil Fekir, quien llegaba entre algodones, además de la baja por sanción de Canales. Y para colmo terminaron lesionados Luiz Felipe, que no volverá a jugar hasta después del Mundial, y Youssouf Sabaly. Un condicionante que obliga al entrenador argentino a reinventarse cada semana.

Desde el inicio de temporada no ha habido una sola semana en la que Manuel Pellegrini haya podido contar casi con su once tipo. En las tres o cuatro primeras jornadas el equipo se vio condicionado por la imposibilidad para inscribir a hasta siete futbolistas, lo que obligó al técnico a prescindir de algunos de sus máximos baluartes y 'jugársela' con los más jóvenes. Además, Canales no pudo ser titular hasta la jornada 4 por una lesión en el tendón de la corva.

La llegada de septiembre trajo la peor de las noticias. Juanmi sufría en Helsinki una rotura de ligamentos del tobillo izquierdo que le mantendrá alejado de los terrenos de juego hasta el inicio de 2023. Cinco meses en el dique seco. Un contratiempo que privaba al Betis de disfrutar de su 'Pichichi' en la 21/22.

Unos días antes, en la visita al Santiago Bernabéu, Nabil Fekir tuvo que parar a los diez minutos por una rotura del músculo de la pantorrilla. Una lesión que le mantuvo un mes alejado de los terrenos de juego. Y para colmo, en su regreso como titular, en Roma, sufría una recaída. Un nuevo hándicap para el francés, que en total ha estado ocho encuentros en el dique seco. Demasiado para Pellegrini, que durante más de un mes ha tenido que prescindir de su máximo goleador y su mejor futbolista.

Entretanto, Pellegrini ni siquiera disponía de laterales derechos naturales en su plantilla. Con Montoya y Sabaly lesionados, ha sido Aitor Ruibal el que ha tenido que ocupar esa posición en no pocas ocasiones. Todo ello sin contar las lesiones puntuales de otros futbolistas como Víctor Ruiz o William Carvalho y el otro condicionante de las expulsiones.

En resumidas cuentas, un hándicap que está desestabilizando la libre elección de jugadores por parte de Manuel Pellegrini, quien aún no ha podido contar con la totalidad de su plantilla en lo que va de curso. El chileno, obligado a seguir reinventándose.