Noche mágica en Mestalla

El Valencia CF quiso la Copa, la peleó y la luchó con orgullo y dignidad y ya está en semifinales. A pesar del resultado de la ida e ir 1-1 al final del tiempo reglamentario, otros dos tantos de Rodrigo -hat trick para el internacional- en el descuento sirvieron para lograr una remontada histórica, de las que se recordarán muchos años. Los Valencia-Getafe son sinónimo de guerra y polémica, de lucha y este no fue una excepción. Mestalla lo vibró, el equipo lo peleó y se vengó de un equipo antipático que le complicó mucho la eliminatoria a los de Marcelino.

De inicio, Marcelino cumplió con lo prometido en la previa y minimizó las rotaciones en su once titular. Apenas Jaume y Ferran de los menos habituales. El técnico había recibido el mensaje de Mestalla y fue a por la Copa... Con tanta ansia que, en el primer minuto, ya perdía por 0-1. Un tropezón entre Gayà y Gabriel y la cantada de Jaume propiciaron que el Valencia supiera que tenía que marcar tres goles para remontar. Jorge Molina no desaprovechó el regalo y puso cuesta arriba la eliminatoria.

El Valencia, enfurecido consigo mismo, se fue a tumba abierta a por el partido. Rodrigo abrió el repertorio de ocasiones con un zurdazo desde la frontal que Chichizola sacó espectacularmente bien abajo. Las llegadas se sucedían y los centros, pero no el ansiado gol. Mestalla grita "¡A por ellos!" y el equipo asediaba al Getafe. Parejo, de lanzamiento directo, lo intentó antes de la media hora de juego.

Con el paso de los minutos las fuerzas y la presión decaían y los intentos del Getafe por no jugar arreciaban. El Valencia CF necesitaba marcar y era justo lo único que le estaba faltando.

Con el paso de los minutos las fuerzas y la presión decaían y los intentos del Getafe por no jugar arreciaban y provocaron alguna que otra ocasión azulona en medio de la marea valencianista. Sin embargo, era el Valencia CF el que necesitaba marcar y era justo lo único que le estaba faltando. Para prueba, un botó. La última ocasión de cabeza de Rodrigo antes del descanso la sacó Mata en la misma línea.

La tónica no cambió tras el descanso y fue Mina el primero que casi roza el gol. El tiempo corría en contra, la noche era fría, pero los ánimos no decaían y así llegó el primero del Valencia, anulado por fuera de juego. Un buen centro de Piccini acabó en gol, pero el VAR lo anuló por fuera de juego de Carlos Soler.

Marcelino reorganizó a su equipo. Sacó a Cheryshev, puso a Soler de mediocentro, a Ferran Torres en la banda que tocabay la cosa funcionó. Rodrigo en el 60 hacía el 1-1. 

Marcelino reorganizó a su equipo. Sacó a Cheryshev, puso a Soler de mediocentro, a Ferran Torres en la banda que tocaba y la cosa funcionó. Rodrigo en el 60 hacía el 1-1. Esta vez sí, inapelable. Quedaba tiempo y el estadio se caía. Noche mágica en Mestalla.

Una remontada para el recuerdo

En el 65 Ferran y Rodrigo volverían a acariciar el 2-1, pero la reorganización duró poco más. El extremo de Foios tuvo que retrasarse al lateral para cubrir el hueco que dejó el lesionado Piccini. Kang In entró al campo con 20 minutos para obrar el milagro y con uno más por la expulsión de Djene.

El Getafe tenía un único objetivo: que no se jugara y empezó a usar todo tipo de marrullerías. Encerrado en su área se defendía como un gato panza arriba de los zarpazos de un Valencia que seguía queriendo, pero al que el tiempo se le agotaba. A la desesperada salió Gameiro por Carlos Soler. El Valencia terminaría con tres puntas sobre el campo y con el guardameta de libre, pero ni por esas.

Se repetía el último resultado copero entre Getafe y Valencia... Aquello fue una final ¿será premonitorio?

Cuando llegó el 2-1, obra de Rodrigo (minuto 91) parecía que era muy tarde, que la justicia no se iba a imponer esta vez. Querer y merecer, por desgracia no siempre es poder, pero en otra noche mágica de Mestalla, como las de Champions, como hacía años que no se vivían, el Valencia en otra contra mágica por la derecha culminada por Rodrigo, lograba el definitivo 3-1. El Getafe puso, eso sí, su colofón a la noche abriéndole la cabeza a Gabriel Paulista. Mestalla al unísono les recordó lo que eran. Benito Villamarín allá vamos. Se repetía el último resultado copero entre Getafe y Valencia... Aquello fue una final ¿será premonitorio?