El celtismo le saca la tarjeta roja a los árbitros
El celtismo ha dicho '¡Basta ya!'. La afición del Celta de Vigo ha mostrado su enfado e indignación por los últimos arbitrajes sufridos y su repulsa más absoluta a la sanción sufrida por Renato Tapia. Organizado por la Federación de Peñas Celtistas se han entregado miles de tarjetas rojas para mostrárselas a Ricardo de Burgos Bengoetxea. El colegiado bilbaíno, de infausto recuerdo para el club vigués, ha visto como al comienzo de cada una de las partes miles de aficionados celestes le han enseñado la cartulina roja.
Unos minutos antes, alrededor de las 14.20 horas, miles de aficionados se congregaron en los aledaños del estadio de Balaídos para recibir al autobús del equipo. Los jugadores llegaron a través de la Rúa dos Olímpicos en dirección a la Grada de Tribuna. Los futbolistas fueron escoltados por centenares de celtistas que aporrearon el autobús mientras se encendían decenas de bengalas que tiñeron el cielo de rojo.
La Federación de Peñas organizó estos dos actos para apoyar al equipo, que sigue inmerso en la pelea por evitar el descenso tras las victorias de Espanyol, Cádiz y Valencia. La afición buscó marcar el primer gol del partido ante el Real Valladolid con este recibimiento y recordarle al estamento arbitral que no estarán callados tras los últimos arbitrajes sufridos donde el Celta se ha sentido perjudicado.
La sanción de tres partidos a Renato Tapia por considerar que sus palabras '¡Qué prepotencia!' dirigidas a Ortiz Arias son merecedoras de dos partidos de sanción que se suman al partido de castigo por la doble amarilla que vio ante la Real Sociedad han sido la gota que colmó el vaso de la paciencia del celtismo. El vestuario y el entrenador, Carlos Carvalhal, consideraron "una barbaridad" y "excesiva" la sanción. Sin embargo el club no ha hecho públicas sus quejas ni ha intentado recurrir la resolución del Comité de Competición.
Por ellos De Burgos Bengoetxea, que en su último partido en Balaídos perdonó la pronta expulsión de Carmona y no quiso señalar un penalti por mano de Rafa Mir, ha visto como miles de aficionados celestes le enseñaban la cartulina roja al comienzo de la primera y de la segunda mitad del duelo ante el Real Valladolid.