'Jurassic World: Battle at Big Rock', el cortometraje

Aún tiene que llover mucho para que volvamos a sentarnos en una sala de cine a ver la próxima película de dinosaurios, pues el estreno de la tercera entrega de Jurassic World está previsto para verano de 2021, no obstante, la franquicia piensa en sus fans y ha decidido estrenar un cortometraje para abrir bocas.

Colin Trevorrow dirige y co-guioniza junto a Emily Carmichael este corto de unos 8 minutos en los que el tono de terror que caracteriza las películas previas, especialmente Jurassic World: El Reino Caido (Bayona, 2018), está muy presente. La trilogía original estrenada en los años 90 nos regalaba escenas de infarto en los que temíamos por la muerte de los protagonistas, pero no era presentada como una historia para darnos miedo como lo hace desde el primer segundo esta nueva historia.

Los dinosaurios andan a sus anchas por La Tierra tras destruirse Isla Nublar y escaparse de las instalaciones en las que se encontraban para ser vendidos como armas. Ahora, humanos, animales y estos seres prehistóricos conviven en una lucha por la supervivencia alrededor del globo.

Aunque no ha sido traducido al castellano, poco hay que entender de la historia más allá de la descripción de las distintas razas que salen y un (pista/spoiler) "¡no dejes que mi hija de 8 años use tu ballesta, hombre!"

Casi lo más interesante de este cortometraje son sus escenas post-créditos, en las que vemos distintas situaciones en las que la raza humana se ha visto "afectada" por la vuelta de los dinosaurios. Y digo casi porque lo más llamativo es el comunicado del principio. Crías de dinosaurios han sido encontradas en EEUU, crías nacidas de manera natural. Ahora los dinosaurios pueden reproducirse sin necesidad de un laboratorio.

¿El fin de la raza humana? ¿El fin del resto de los animales tal y como los conocemos? La tercera entrega nos sacará de estas dudas pero, sinceramente, no veo cómo puede haber vuelta atrás a la situación y la única solución es la convivencia.