Tesla, Volkswagen y el resto ya lo saben: el dato que juega en contra de los eléctricos en España

Como sabrás si eres conductor habitual y ocasional, la Unión Europea ha anunciado que, a partir de 2035, los coches que no cuenten con un motor eléctrico no podrán venderse en el continente. Por ello, muchos fabricantes llevan años invirtiendo en el desarrollo de modelos eléctricos para ofrecer en sus catálogos. Aunque esta transición está en marcha, la situación de los coches eléctricos en Europa varía considerablemente, y en España hay un problema importante que está limitando su popularidad: la falta de infraestructura de carga.

A pesar de que el Tesla Model Y es actualmente el coche más vendido en Europa, y de que muchos conductores eligen coches eléctricos porque la mayoría de sus trayectos son urbanos o suburbanos, aún hay muchas personas que dudan de la capacidad de los eléctricos para viajes largos. Uno de los principales motivos de esta desconfianza es la falta de estaciones de carga rápidas en España.

La pobre red de puntos de carga en España es el gran problema

En nuestro país, solo el 21% de las estaciones de carga son de carga rápida, lo que significa que la mayoría de las paradas para recargar el coche son mucho más largas de lo deseado y de lo necesario. Un viaje que se puede hacer en cinco horas puede alargarse a 10. Imagínate si viajas con niños.

Para muchos este es el gran inconveniente, por encima de los precios más altos de los coches eléctricos o las dudas sobre la durabilidad de las baterías. Esta situación contrasta con otros mercados europeos donde la infraestructura de carga es más completa, y donde el uso de coches eléctricos es mucho más popular.

Es imprescindible mejorar la infraestructura para cumplir con los objetivos medioambientales europeos

Este problema está condicionando el auge de los coches eléctricos en España, y es una de las principales barreras a superar para impulsar su uso en el país. A pesar de que muchos conductores ya han superado la barrera de la autonomía gracias a la disponibilidad de puntos de carga en casa, muchos expertos aseguran que la falta de estaciones de carga rápidas sigue siendo un impedimento importante para la adopción de los eléctricos en el mercado.

Aunque la infraestructura de carga es responsabilidad de las empresas del sector, la falta de regulación y coordinación en este sentido está dificultando la implantación de soluciones. Además, en algunos casos, los costes de la carga en estaciones públicas son prohibitivos, lo que dificulta aún más el acceso a estos puntos de recarga para los conductores.

Con todo, es fundamental que en España se tomen medidas para impulsar la infraestructura de carga, lo que permitirá acelerar la adopción de los coches eléctricos en nuestro país.