Correa y Oblak impulsan a un Atlético ya en zona Champions

El Atlético de Madrid ya descansa en los puestos de Champions League. Pero le ha costado más de la cuenta ante un Girona que ha demostrado esta temporada que sabe pelear. Ángel Correa fue el protagonista en un partido que debía calificar el estado de forma de los colchoneros de cara a la cuarta jornada de Champions. Y con la vista puesta en el miércoles, el Atlético pudo vencer por la mínima.
Las ideas las tenían bien claras desde el comienzo del choque. El equipo de Simeone salió bien organizado en ataque y el premio llegó bastante pronto. Un buen centro tocado de Antoine Griezmann puso en bandeja el remate de Correa, que no perdonó. A los cinco minutos de partido, el Atlético ya iba por delante en el marcador y la afición acompañaba a esas sensaciones positivas.
No obstante, pese a prever un dominio rojiblanco, lo cierto es que no tuvo tantas ocasiones en ataque en la primera parte. Tuvo que esperar de nuevo a un arranque de la segunda parte para hacer el segundo gol. El error de bulto del guardameta Juan Carlos le regaló el balón dentro del área a Correa, que de nuevo volvió a meter el balón dentro de la red. Pero el Girona no había dicho su última palabra.
Rodrigo Riquelme, la estrella del Girona propiedad del Atleti, recortó distancias con un disparo que tocó en la defensa rojiblanca desviando su trayectoria. Ese fue el inicio de una ofensiva catalana que estuvo muy cerca de causarle un disgusto a Simeone. Tanto Oblak como el poste impidieron en más de una ocasión que el Girona igualara el encuentro, por lo que el Atlético sufrió mucho en el último sector del partido.
Aun así, los tres puntos y los demás resultados ligueros impulsaron a un Atlético de Madrid que es actualmente cuarto, empatado a puntos con el Betis y con la Real Sociedad.