Ángel Gaitán publica su revisión más esperada y desgrana los coches BYD: "Tanto lo bueno como lo malo"

Ángel Gaitán se ha hecho un sitio en las redes sociales demostrando los posibles problemas que pueden encontrar diferentes usuarios en los vehículos que quieren comprar. El último caso fue el de los BYD. Una marca de automóviles china que, a diferencia de otros fabricantes, no le han facilitado modelos para probarlos. Por ello, se ofreció a diferentes propietarios a revisarlos de forma gratuita y dar el resultado. Algo que ha mostrado a través de un vídeo en en el que se ve hablando con los diferentes conductores de esta marca.

“Todo este trabajo que se va a hacer en GT Automoción gratuito es solo y exclusivamente para informaros de si hacéis bien o no comprando BYD, porque estamos aquí para informar a la gente”, anuncia en un primer momento, para después comenzar la revisión de los diferentes vehículos. Entre los modelos que le han facilitado los diferentes conductores que se han acercado al lugar es el BYD ATO 3.

El primero, se trata de un coche 100% eléctrico cuyo usuario con 100.000 de kilómetros, de primeras, no está haciendo el mismo kilometraje que él dice. De hecho, desvela el propietario que el comercial le señaló que tenía una autonomía de 500 km y no llega a más de 270 km. “Este hombre tiene un coche que pensaba que un viaje iba a hacerlo de ida y vuelta con la batería, y tiene que cargar en el trayecto. A ver si se lo apuntan”, resalta.

BYD no le facilitó modelos de su marca a Ángel Gaitán

El siguiente se trata de un híbrido. En este caso, el mecánico influencer anuncia que el hecho de que sea un vehículo de procedencia china, “no significa que sea coche eléctrico, también tiene un motor de combustión”. Una de las cosas que más le llaman la atención es el coste. “Parte desde 39.000 € y este es de 48.000 €. Llama la atención, el interior en sus calidades para bien, pero repito coche con su precio de venta al público de casi 50k € y 40 k € coche chino ese precio…”, admite.

En este caso, vuelve a existir el problema de la autonomía. El conductor señala que le han cargado bastantes veces con placas solares, tiene un gasto de 1.300 km, y “ha consumido un deposito entero de gasolina y le hemos cargado como cuatro o cinco veces”. “La autonomía que dicen de una sola carga de gasolina y de eléctrico son 1.800 km. Tiene 1.300 km”, advierte el propietario.

Posteriormente, muestra los bajos del vehículo donde señala las pinturitas y diferentes partes del coche como el compresor de aire acondicionado, el motor, etc. “Dentro de lo que cabe tengo que decir que es bueno. Por lo demás, seguimos investigando”, advierte, para volver a hablar con el propietario de este nuevo modelo en el que señala que el coche solo tiene 1.000 km y lo que ha podido verificar el mecánico es que la autonomía que se promete en la web y en los registros “no tienen nada que ver”.

Otro de los aspectos que muestra de otros modelos de esta marca asiática es que no sabe si decir que es minimalista, débil o frágil. “El tren trasero, el puente, me da una sensación de debilidad de un impacto tremenda”, comenta. Posteriormente, se fija en cómo colocan las ruedas de un vehículo que vibra a 120 km/h o 130 km/h y “es horroroso de conducir. “Voy a quitar esta rueda, que para el que no lo sepa BYD pone tubo en lugar de tornillo, no es nada malo. Pero es información que quiero que tengáis. Porque está el coche aquí si tiene 7.000 km y ya le tenemos en el taller”, comenta.

Fue muy claro en sus apreciaciones

Entonces, encuentra el que puede ser el problema, una vez que revisa todo. ”Igual con esto pedazo de discos, el coche tiene el problema en los discos porque mirad el cambio de temperatura y el calentón que tiene con 7.000k”, explica, mientras posteriormente en otro vehículo expone que ha sacado “más de 100 gramos de plomo llevo una rueda nueva”.

Por último, muestra otro BYD ATO 3 de renting, pero que desde el km 0 hasta los 87.000 km que lleva con él como propietario los ha hecho él. En este caso, le preguntó si notaba vibraciones y le mostró un llantazo. En este caso, no era una cuestión del modelo ni del fabricante, sino de un taller al que había ido el propietario para cambiarle la cubierta tras un reventón que sufrió con un bache.

“Por lo demás, bastante bien. El eje trasero no es tan débil, sinceramente hay que decir las cosas como son, lo único que he visto es el interior que si que hemos visto que está un poquito peor”, advierte. Al final, aunque desvela al último propietario que le encantaría decir que es una mierda por tocar las narices a los que no le han permitido probar los BYD, reconoce que no lo es y que no está mal.