Álex Márquez no se cree su segunda posición en Sachsenring y se confirma ante Pecco Bagnaia: "Solo pensaba en no caerme"

Álex Márquez llegaba al Gran Premio de Alemania con poco que ganar y mucho que perder. Se lesionó en el pasado Gran Premio en Assen, pasó rápidamente por quirófano para arreglar una fractura en la mano izquierda y llegaba a Sachsenring con la clara intención de perder los menos puntos posibles con Pecco Bagnaia. El del Gresini Racing, no solo no ha visto como el italiano le recuperaba puntos en el Mundial, sino más bien todo lo contrario. Su fin de semana, pese a seguir varias recomendaciones médicas para controlar la inflamación de la mano, ha terminado de la mejor manera posible: con una segunda posición en la carrera de este domingo. Solo su hermano Marc ha finalizado por delante, y con un Bagnaia que ve cómo Álex se consolida en la segunda posición del Mundial.

"Llegué aquí con la mentalidad de perder los menos puntos posibles con Pecco, y nos vamos con seis puntos más que él. Seguramente la lesión me ayudó a no caerme. Vi caer delante a dos pilotos, y solo terminamos diez. Hace dos semanas estaba volando hacia a Madrid para operarme, de modo que estoy muy contento de poder estar aquí. A diez vueltas para el final, estaba muy agarrotado de la parte izquierda, porque iba demasiado rígido, y eso no ayudaba a la moto a girar. Espero que en Brno vaya un poco mejor", resumía el pequeño de los Márquez en DAZN. Una carrera que, además, es muy especial para él: ya es centenario en la categoría reina.

P1 🔴 200 GPs @marcmarquez93
P2 🔵 100 GPs @alexmarquez73

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— MotoGP™🏁 (@MotoGP) July 13, 2025

Álex Márquez mete presión a Ducati y a Bagnaia

La realidad es que Álex Márquez está superando cualquier tipo de expectativa. Más allá de sus resultados, queda claro que su nivel es superlativo. El catalán termina regularmente en el podio, por delante de Bagnaia, dejando muy claro que su intención es quedarse ahí hasta el final y sumar un subcampeonato histórico para él. "Nosotros estamos haciendo muy bien nuestro trabajo, pero somos conscientes de que estamos en una situación que corresponde a los equipos de fábrica", explica lanzando una pulla tanto a Ducati como a Bagnaia.

"Hablé con mi equipo y les dije que hiciéramos como si no estuviera lesionado. Les pedí preparar la carrera técnicamente como si no tuviera ningún problema, porque así podía desconectar. Ya me encargué yo de tratar la mano, y de pasarme seis y siete horas diarias en máquinas, para recuperarme", zanja el catalán.