El 'tico' en estado puro: la reaparición más esperada
El fichaje estrella del Dépor esta temporada gozó de la confianza de Vázquez y de Rubén de la Barrera hasta que una lesión antes de recibir al Pontevedra le apartó de los terrenos de juego. No había dudas de su calidad pero Borges no arrancaba. Sin embargo, este domingo, reapareció. Lo hizo abriendo el marcador y cuajando un gran partido ante el Numancia.
Fueron los problemas físicos los que le impidieron seguir siendo indiscutible en un Dépor que se alejaba de sus objetivos. En el entorno se escuchaban críticas pero el peso del tico en el vestuario era muy grande y ahí seguía, semana tras semana. Sin embargo, las cosas cambiaron tras la lesión. Una lesión que le impidió ante el Pontevedra, Celta B y Zamora. Tres victorias consecutivas sin Borges. Y al recuperarse, le tocó banquillo frente al Marino de Luanco y el Langreo ya en la segunda fase.
Pero De la Barrera cambió de opinión. Así, para recibir al Numancia en Riazor volvió a echar mano del veterano jugador y no se equivocó. Su regreso no pudo ser mejor. Marcó y culminó una buena actuación. Era la reaparición más esperada, Celso Borges en estado puro. El que todos anhelaban. Ese que venía a marcar la diferencia.
"Un desahogo", declaraba el propio centrocampista al finalizar el encuentro que no pensó en revanchas cuando celebró el gol pero sí supuso para él una enorme alegría.
"Fue pura emoción. Quería proyectarlo porque me nacía así. En ningún momento era revancha ni nada por el estilo. Estaba contento", afirmó un futbolista que seguro que tendrá mucho que decir sobre el césped en los tres partidos que quedan para amarrar esa Primera Federación ahora tan deseada.