Peugeot tiene un diamante que, para muchos, es la mejor compra de la marca

Rivales no le faltan. El Ford Puma o el Fiat 500X buscan al mismo cliente. Sin embargo, pocos pueden igualar su relación calidad-precio. Es aquí donde muchos lo definen como el verdadero diamante de Peugeot, una joya accesible que brilla por lo completa.

Lo primero que sorprende en el Peugeot 2008 es su precio. Desde 21.940 euros financiado o 23.040 euros al contado, se coloca por debajo de muchos rivales. Y lo hace sin renunciar ni a equipamiento ni a estilo. En este sentido, es difícil encontrar un SUV tan equilibrado.

Uno de los B-SUV más grandes que puedes comprar

El diseño juega un papel clave. Con 4,30 metros de largo y 1,77 de ancho, parece compacto, pero su maletero de 405 litros demuestra lo contrario. Si se necesita más espacio, los asientos abatibles lo llevan hasta 1.467 litros. Un detalle que lo hace ideal para familias o viajes largos.

La mecánica no busca cifras espectaculares, sino eficiencia. El bloque 1.2 PureTech con 100 CV y 205 Nm se combina con un cambio manual de seis velocidades. Sus prestaciones son correctas: 0 a 100 km/h en 12 segundos y una velocidad máxima de 183 km/h. Lo mejor está en el consumo, apenas 4,6 litros cada 100 km.

Un equipamiento a la altura

En el interior destacan elementos que antes eran exclusivos de gamas más altas. El acabado Style añade climatización automática, seis altavoces, ventanillas traseras tintadas y hasta un detector de obstáculos. A eso se suman los faros EcoLED, que mejoran la visibilidad y aportan un aspecto más moderno.

Pero no todo es equipamiento en este modelo de Peugeot. La seguridad está muy cuidada. De serie incluye airbags frontales, laterales y de cortina, ESP con Hill Assist, control de presión de neumáticos y limitador de velocidad con reconocimiento de señales de tráfico. En este punto, no hay concesiones: protege como modelos más caros.