Ilusionando al Tartiere

Ha habido que esperar más de media temporada para poder ver a una de las grandes esperanzas del oviedismo esta campaña. Diego Fabbrini demostró en tan solo un amistoso en pretemporada de lo que podía ser capaz, pero una grave lesión le apartó de la competición hasta este 2018.

Tuvo una presencia testimonial ante el Sporting, entrando en los minutos finales para dar oxígeno al equipo e incluso casi anota un gol para cerrar el partido en una contra. 
Ante el Cádiz no fue convocado por precaución, tras una pequeña dolencia en un entrenamiento, pero contra el Albacete tuvo 22 minutos para ilusionar a una hinchada que tiene unas ganas locas de verle jugar. 
El italiano entró sustituyendo a Aarón Ñíguez y demostró movilidad y habilidad con el balón cada vez que entró en contacto con el esférico. Se ve que aporta algo distinto a la línea de mediapuntas y que asociándose tanto con Saúl como con Aarón pueden surgir acciones de gran calidad.
Atrevido, con el balón pegado al pie y buscando los espacios entre líneas, no tuvo una aportación clave, pero fue una de las vías de los carbayones para crear peligro en la recta final ante un encerrado Albacete. El italiano jugó prácticamente sus primeros minutos e ilusionó todavía más al Tartiere.