San Mamés corea el nombre de un colosal Gurpegi que desquició a Cristiano Ronaldo

San Mamés vibró con el dominio del Athletic sobre el Real Madrid. Los rojiblancos impusieron su juego al del equipo blanco, sujetado de pies y manos durante casi todo el encuentro, especialmente gracias al colosal trabajo de Carlos Gurpegi. La parroquia bilbaína así se lo reconoció coreando su nombre a toda potencia. 

El central navarro apareció en el momento justo para abortar todos los amagos de Cristiano Ronaldo, Benzemá y Jesé de romper la última línea de contención del equipo rojiblanco. Les frenó de todas las formas posibles. Inmenso en las anticipaciones, inteligente en los cruces e incluso sobrado para parar el balón con el tacón haciendo que sus rivales se pasaran de frenada. La única forma que encontraron los merengues de superar el entramado defensivo del Athletic fue con el error de Iturraspe que les dio ventaja en el 1-0. Poco pudo hacer ahí. 
El navarro, para colmo, fue uno de los principales protagonistas de la jugada polémica del partido. No se achicó ante el inverosímil y airado reclamo de Cristiano Ronaldo, que pedía penalti por mano en la enésima vez que el capitán rojiblanco le robaba la pelota. Se lo recriminó y el sobrado atacante portugués reaccionó tocándole la cara. El árbitro lo vio. Expulsión. Los leones, con 1-1 en el marcador, afrontaban la recta final en superioridad.
Los rojiblancos buscaron culminar la remontada. Solo sufrieron mínimamente con la entrada de hombres frescos como Morata, que tenía que hacer la guerra por su cuenta. Pero en cada intento, ahí estuvo de nuevo Gurpegi. La afición le reconoció su colosal aportación coreando su nombre al unísono: "'¡Gurpe, Gurpe!".
No menos agradecido estaba Valverde, que le dedicó estas palabras tras el encuentro: "Es un seguro para nosotros, no solo por lo que hace sino por todo lo que transmite a los compañeros que tiene alrededor y a la grada. Hace un trabajo impagable para el equipo, la temporada que está haciendo es impresionante".