Amurrio Club: Crónica de Navidad
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Arratzalde on, cuando nos conocimos hace tres años yo era colaborador del Amurrio, pero ahora que soy el presidente te invito este próximo sábado día 17 al partido que jugaremos en Amurrio contra el Santutxu a las 16:00 horas. Ondo izan!
Como a un bautizo. Como a un enlace matrimonial. 'Colaborador', dice de sí mismo que era. Modestia aparte, a un partido de los suyos me invita, allá en Basarte, baso-artean, entre el bosque, ese claro que en la noche de los tiempos, en el día de mi juventud, visité, 'Garibaldi' en el banquillo visitante, el técnico del Begoña. 39 años después, ¿sienten ustedes la friolera de los tiempos?... el Santutxu rinde visita a Basarte, el Santutxu de 'Markitos', el hijo de un Garibaldi caído en la cruel batalla de la vida. ... Siete minutos para el comienzo del partido, Cuantas entradas se han vendido, una tan sólo, poco papel, cuatro o cinco serán cuando el partido sea fragor, taquilla cerrada, puerta trincada, que no se cuele ni Dios, allá con su conciencia los que se sirvan del palco de los sastres para burlar paredes y muros, hay gente que sólo se afloja el bolsillo cuando un cucurucho de castañas compro para calentarse las manos.
17 de diciembre, las orejas nos deja ver el lobo del invierno, más que el frío la humedad, esa que hasta los huesos cala, mejor futbolista que el verde brega que aficionado en la tribuna sentado, en la valla apoyado, en el ambigu refrescandose el gazpacho, el pincho por lo del hambre, el café que con el tirite lucha...y lo detiene...
Me dirijo a la tribuna, en busca del palco presidencial. En vano espero. Jauregi presidente es guerrillero, va de aquí para allá, comandante del Club, no es mentir medirle el cargo. Tampoco lo es que en las filas de su equipo milite Guevara, Camilo, ni a posta, vamos, va el campeonato mediado y el Amurrio en el medio, donde habita la virtud, la zurda de un veterano de guerra, 33; quizás 34, la edad ideal, la de ese revolucionario que mataron en Judea. La Revista es una perla que en dos años ha engordado.
En euskera, en castellano, los últimos resultados, la clasificación. Aritz Arberas Pampin, preparador físico de lujo, ave de paso. Los gloriosos años de este siglo en su comienzo, diez más dos, doce, más de una década entre los grandes de la Segunda B, Cándido, Lizeranzu, cualquier tiempo no, pero ese en concreto si, mejor, pero sólo en resultados.
El Amurrio se ha hecho fuente en su feudo de Basarte. 270 socios. Más o menos. Qué más da. Aunque ni ellos cumplan y vengan. Lo que importa es la base. La cantera. Cerca de 300, qué barbaridad. Como bárbaro, chevere que diría Guevara, el que en Artunduaga, frente al Basconia, fuera expulsado, Camilo sostuvo al equipo para que en Basauri triunfará la revolución de un empate sin goles frente al equipo del 'Gallo'...
Va el partido, va. Juego de tronos en el que salvarse de la quema es la máxima corona. "Este Santutxu siempre se rezaga en la primera vuelta", comenta Jauregi, "pero en la segunda pega un arreon y se salva se la quema; buen entrenador este Markitos".
No lo es menos Javi Pereda, el encargado de gestionar hasta el contento a una plantilla que es cuadrilla de amigos que juega por divertirse a la vez que defiende unos colores, azul y blanco, que hace 67 años ya que se pintaron sobre unas zamarras que perduran, siempre igual, siempre distintas, la ropa se malada por el uso y se impone el cambio, la sustitución, unos que se van, otros que entran, dignos de elogio y admiración estos que hoy se miden al Santutxu.
Mucho hay que amar el fútbol, el equipo y su filosofía para firmar en una ficha federativa a cambio de una soldada mensual seis veces mayor que la entrada para ver en febrero a 'Magna Carta' en la sala que la BBK tiene en la Gran Vía del 'Botxo, pero 22 euros menos que lo que pague en una sucursal de KUTXABANK para que la maquina en la que tuve que trajinara terminara 'vomitándome' un bono para los dos días del Musical Legends que en Junio tendrá lugar en el espacio de la Ola, en Sondika, donde, poco antes, tras tomar tierra en el aeropuerto de Loiu procedente de Belfast, se habrá personado ese Dios de la música llamado Van Morrison, "León" apodado, uno de los nuestros.
103.000 euros son los dineros que Miguel Angel Jauregi maneja para conformar el presupuesto, cuatro veces menor que un equipo que él se sabe.
Sus futbolistas juegan por placer, por amor al arte, el fútbol lo es, 60 euros al mes más el valor del carburante suena a propina, a esa paga, no de domingo, sino al mes, que unos padres le dan al hijo para que vaya al cine, se compre unos chuchos y se tome un café, una cocacola, comprarse el último CD de Betagarri o ver una de Tarantino en los cines de Zubiarte.
Esta es la "Tercera' del Amurrio; la del Portu es descomunal y, antes de empezar el partido, tan sólo cuatro puntos en la tabla les distancia, que serán siete al final de la partida: el Portu terminada ganando en Zalla dos horas después de que el Amurrio resulte derrotado en su feudo de Basarte rompiendo una racha de dos meses sin perder. Cero a un goles. El Santutxu marcará de cabeza, a balón detenido, jugada que no sorprende a Jauregi presidente, "Son maestros de la estrategia; de la necesidad de su pequeño y desgastado Maiona han aprendido a hacer virtud.
Saldrán de abajo, remontaran el vuelo. Sereno es el discurso del máximo mandatario de un equipo que se muestra sumamente elegante en la derrota, "la han merecido, han gozado de ocasiones". El Santutxu se esmero en tener muy alejado de su área a los hombres del Amurrio. A partir de ahí, patadon y tente tieso, para qué engañarnos, hay diversas maneras de jugar, modos de llegar a la victoria.
Los rojos celebran en alborozo un triunfo de valor incalculable. Los locales se reúnen en el centro del campo para aplaudir a los suyos, a la afición. Mientras escucho el ruido de sus manos al chocarse entre sí, reparo en la gente que está fuera del rectángulo de juego. Y he aquí que mi admiración por los del valle de Aiala se acrecienta al ser consciente de que casi son más los jugadores sobre la hierba que los aficionados que abandonan la tribuna y esos otros que decidieron aguantar de pie, soportar, desafiar esta humedad que ataca la piel hasta fijarse en los huesos.
En esta ocasión, la experimentada zurda del sabio y veterano Pablo Paredes no tuvo poder, no fue faro que ilumina la travesía de los suyos. Futbolistas que ya salen de los vestuarios bien ducados, agua caliente no les faltó, ni el cariño de su presidente, al que le pido que reúna a los dos entrenadores para hacerles una fotografía y así dar fe que el Desmarque bizkaia, aceptando la invitación del presidente del Amurrio, se acercó a Basarte.
... Buscando la luz para encender la instantánea, nos colamos en el habitáculo en el que el trío arbitral estaba redactando el acta del partido. Markitos tenia mucha prisa y delegó en su segundo. Javier Pereda aguantó el tipo con elegancia. Miguel Jauregi se colocó mediando entre los dos entrenadores. Un presidente que, cada quince días, llena de contenidos un boletin precioso, BASARTE, Revista oficial del Amurrio Club, 300 ejemplares que se expanden más allá de los límites del estadio. Bendito fútbol de Tercera. Ese que resiste elegante y bravo. A pesar de las televisiones, que llenan bares y retienen al aficionado al calor del amor de su hogar.
Amurrio o muerte!
Amurrio a muerte!
¡Hasta la victoria siempre, 'comandante Miguel Angel Jauregi!
Por Luis María Pérez, Kuitxi, Futbolista, periodista, montañero, pero sobretodo escritor: cuentos, relatos, cronicas, artículos radiofónicos, literatura de viajes.