Infierno y gloria verde

650 kilómetros de por medio y la misma emoción. Los aficionados del Unicaja vuelven a celebrar un título continental tras la gran victoria del conjunto cajista en el tercer y definitivo partido de la Eurocup. Los que fueron en la Fonteta se hicieron escuchar desde el principio y apoyaron a los suyos desde cerca, donde el aliento más se nota. Pero no eran los únicos que estaban pendientes del equipo.

En Málaga, el Martín Carpena también albergó a varias decenas de seguidores que acudieron al palacio con un sueño que un par de horas después se hacía realidad. Los que vieron el partido en el pabellón lo celebraron a lo grande por las calles de la ciudad, a golpe de claxon. Algunos valientes incluso se dieron un baño en alguna fuente. La ocasión la merecía. 

Mientras tanto, los más de medio centenar de aficionados que lo presenciaron en la Fonteta vivieron el triunfo desde dentro. Tras la ceremonia de entrega de premios y los formalismos, saltaron al parqué, se abrazaron a los jugadores y levantaron a hombros a más de uno. Éxtasis absoluto de una ciudad y una afición necesitada de emociones fuertes como las de esta noche.