Lexus ha dado en el clavo con el LBX, pero tiene dos inconvenientes a tener en cuenta

Lexus decidió hace ya un tiempo tomar una decisión más que acertada: entrar de lleno en el segmento de los B-SUV, un segmento en el que, al margen de alguna excepción, las premium no suelen tener mucha presencia.

Y lo ha hecho de la mano de su LBX, su SUV más pequeño y su modelo más barato con el que, eso sí, la marca japonesa sigue apostando, como no podía ser de otra forma teniendo en cuenta que se trata de la marca premium de Toyota, por lo motores HEV.

De hecho su motor híbrido auto recargable pasa por ser uno de sus mejores argumentos de venta, aunque cabe destacar que el hecho de que sea un modelo premium y que cuenta con calidades muy top y mucha tecnología juegan también mucho a su favor.

Los dos inconvenientes del Lexus LBX

Evidentemente no es un modelo barato, entre otras cosas porque es un modelo premium, pero sí que es un modelo perfecto para aquellos que quieren moverse habitualmente por entornos urbanos e interurbanos con un coche muy top, cómodo, eficiente, bien dotado de serie en todos los sentidos y con un diseño muy atractivo.

Eso sí, este LBX tiene dos pequeños inconvenientes que al menos deben tenerse en cuenta a la hora de ir a por uno de ellos. El primero es que el ángulo de apertura de las puertas traseras es mucho menor del que es habitual en este segmento y, por lo tanto, el acceso y la salida de estas plazas, sobre todo para niños en sillitas, no es que sea el mejor de la categoría.

El segundo es que, especialmente en la versión 4x4 de este LBX, la capacidad del maletero acaba siendo demasiado justa para un modelo que, sin ser un familiar, sí que está pensado para que sea una opción polivalente para el día a día así como para alguna escapada.