Toyota convierte al Corolla en una bestia
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El Toyota Corolla actual seguirá vivo con el tres cilindros para versiones más accesibles
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Vale la mitad que un Toyota Land Cruiser y no tiene nada que envidiar
El compacto más conocido de Toyota está a punto de vivir un salto inesperado. Un cambio profundo. Una revolución silenciosa que convertirá al Corolla en uno de los deportivos más radicales jamás fabricados por la marca. Lo que antes era un símbolo de fiabilidad discreta, ahora quiere ser un arma para enfrentarse a los gigantes europeos. Y Toyota está decidida a lograrlo.
Los ingenieros de GAZOO Racing llevaban tiempo advirtiéndolo: el actual motor 1.6 turbo de tres cilindros ha llegado al límite. Es ágil y explosivo. Pero ya no ofrece margen para crecer. 305 CV parecen muchos, pero no suficientes para una firma que aspira a superar de una vez por todas a Volkswagen en su terreno favorito: los compactos salvajes.
Toyota prepara un nuevo bloque para el GR Corolla
Por eso Toyota ha decidido romper con lo establecido. Cambiar de filosofía y apostar por un nuevo bloque que marque diferencias. Y así nace el proyecto que más expectación ha generado en años: un motor 2.0 de cuatro cilindros, creado desde cero para soportar potencias superiores a los 400 CV sin apoyo eléctrico. Un movimiento poco habitual en tiempos de híbridos, pero que refuerza la ambición deportiva de la marca.
La idea no es solo aumentar números. Es elevar el estatus del Toyota Corolla y convertirlo en un referente. Y, de paso, superar al rival alemán. La futura versión GR quiere situarse por encima de las mejores cifras del segmento y dejar atrás de forma definitiva la etiqueta de compacto “sensato”. El Corolla quiere rugir.
Su plataforma servirá para los Celica y MR2
Además, este salto llega después de reconocer internamente las limitaciones del tres cilindros. Vibraciones, complejidad mecánica y costes elevados complicaban futuras evoluciones. El nuevo motor solventa todos estos problemas. Es más estable, más robusto y más escalable.
El desarrollo, eso sí, llevará tiempo. Toyota no quiere errores. La marca japonesa trabaja en una plataforma GR más ambiciosa, pensada para alimentar varios modelos deportivos. Entre ellos, los próximos Celica y MR2, que compartirán esta nueva filosofía de potencia pura.