La RFEF quiere luchar contra las altas temperaturas
Tras una reunión celebrada el pasado lunes 18 de junio, la Comisión Delegada de la RFEF ha propuesto al Consejo Superior de Deportes (CSD) la modificación de los horarios en aquellos partidos donde las condiciones climatológicas supongan un riesgo para todos los profesionales y aficionados implicados en dicho evento.
Esta propuesta contempla el período comprendido entre el 20 de mayo y el 10 de septiembre, y hace especial atención a las zonas geográficas más propensas a sufrir altas temperaturas. En el comunicado proporcionado por la RFEF se especifica que la intención es que no se inicien encuentros "de categoría nacional antes de las 19:30 horas cuando las temperaturas sean muy altas o cuando exista una humedad relativa de más del 70 por ciento y se superen los 28 grados".
De esta forma, el CSD tendrá que estudiar la modificación del artículo 214 del Reglamento General en pos de asegurar la salud de deportistas y seguidores en los terrenos de juego. Esta norma complementaría a la medida ya implantada este curso, bajo la denominación 'cooling break', que consiste en parar el encuentro para permitir la hidratación tanto de jugadores como de cuerpo arbitral.