Jon Rahm: "Tenía en mente ir a la final de Copa"
Jon Rahm tiene dos grandes pasiones, el golf y el Athletic Club. Las dos se han visto frustradas por la pandemia del coronavirus, que está ya azotando con fuerza a Estados Unidos. El golfista de Barrika, confinado voluntariamente en su casa de Phonenix (Arizona), donde aún es posible salir a la calle, los clubes de golf sigue abiertos e incluso se siguen disputando algunos torneos, tenía previsto acudir este sábado 18 de abril a Sevilla para presenciar en directo la final de Copa entre el equipo de sus amores y la Real Sociedad, si el COVID-19 no se hubiera cruzado en la celebración de este evento, aplazado sine die.
"Era complicado, pero tenía en mente ir. Seguramente hubiese ido a ver la final, sí", confesaba Rahm en una entrevista a Radio Euskadi.
La cuarentena del golfista vizcaíno comenzó "al volver de un torneo en España". "Al llegar a casa, Kelley su mujer) y yo decidimos quedarnos y salir lo mínimo".
Aunque en Arizona no tiene una situación tan severa como Nueva York o Euskadi, Estado Unidos ya está sufriendo, "como ha pasado en Europa, unas semanas más tarde" el azote de la pandemia.
A pesar de la laxitud en las normas de confinamiento, Jon Rahm ha tomado conciencia de que lo mejor es "que te quedes en casa y es lo que he hecho yo". "No estamos en contacto con nadie, muy parecido a la vida allí, lo único es que aquí esta todavía permitido salir. Igual nos metemos en el coche para ver algo que no sea la casa", bromeaba. "Tengo un gimnasio en el jardín, una esterilla en la que pego golpes,... medidas que tomo yo mismo porque los campos siguen abiertos y hay torneos de golf", explicaba.
Asume que está en una posición "de influenciar al mayor numero de personas" y debe aprovechar para "ayudar a los que mas lo necesitan y apreciar a los que más están ayudando". "Los que están en primera línea se ponen en riesgo salvando muchas vidas y es todo un honor poder ayudarles", afirmaba.
De momento, los dos circuitos más importantes, el PGA Tour y el European Tour, se encuentran suspendidos temporalmente a falta de la evolución de la pandemia. Rahm confía "al cien por cien en las autoridades para que tomen la decisión más lógica posible" para reanudar la competición. "Han dicho que el primer torneo se jugará sin espectadores, que será muy extraño. Jugamos para nosotros pero no deja de ser espectáculo y entretenimiento. Pero es lo necesario ahora hasta que estemos seguros de que el virus está en decadencia. Habrá protocolos, no sé si de test, para asegurar la salud de todos".
Ganar un grande y ser el número 1
El de Barrika tiene el objetivo puesto en dos direcciones: ganar su primer grande y alcanzar el número 1 del ránking. "Lo veo cerca porque estoy ahí, pero con la situación como está, hablando con aita y ama y con mi hermano, cuesta concentrarse en temas deportivos. Esto pensando más en ver que pase todo esto, en que la familia y los amigos de aquí y de Bilbao estén bien. Ojalá sea el año en que consiga mi primer grande. La semana del Masters es la fecha mi cumpleaños, ojalá sea especial. Sería un honor poder llegar al número 1, seria un gran sueño cumplido", concluía.