Julio Salinas elige al Barça antes que el Athletic: "En Bilbao se enfadan pero lo soy a muerte"

La Copa del Rey ha llegado este miércoles a Sevilla para la disputa este sábado de la final entre el Barcelona y el Real Madrid en La Cartuja. Allí lo ha hecho de la mano de Rafael Louzán y de un representante por club, con Pepe por los madridistas y, por los culés, un Julio Salinas que ha mostrado su predilección por el cuadro catalán por encima del Athletic Club.

En una entrevista para Claudio Luca Rosa, de EFE, el exdelantero fue claro al preguntarle sobre cómo se sentía ante la presencia del Barça en la final copera: "Sí, me pongo nervioso, alguno se me enfada en Bilbao porque dicen que soy del Barcelona, pero lo soy a muerte, mis hijos son auténticos forofos".

Julio Salinas, bilbaíno de nacimiento, se crio en la cantera del Athletic y, tras varios años en las categorías inferiores y cuatro con participación en el primer equipo, en 1986 se marchó al Atlético de Madrid, donde pasó dos años antes de marcharse al Barcelona. En el conjunto vasco ya había conquistado dos Ligas, una Copa del Rey y una Supercopa pero fue en el club azulgrana en el que pasó sus mejores años.

En la ciudad condal disputó seis temporadas, todas a las órdenes de Johan Cruyff, con los que ganó cuatro Ligas, una Recopa, una Copa del Rey, dos Supercopas de España, una de Europa, y la Copa de Europa de 1992 en Wembley. En 1994 se marchó tras la final de Atenas en la que cayeron contra el Milan antes de pasar por Deportivo de La Coruña, Sporting de Gijón, Yokohama Marinos y Alavés.

Julio Salinas y sus recuerdos de una final de Copa del Rey

Con el Barça, Julio Salinas jugó y marcó en la final de Copa del Rey que vencieron en 1990 también ante el Real Madrid: "Uno está nervioso porque sabe lo que significa y te das cuenta cuando pasa el tiempo más que cuando jugabas. Cuando juegas estás en tu mundo, es otra historia, pero cuando te retiras ves lo que significa y es increíble, son sentimientos de miles de personas".

"Yo dormía muy mal la noche de antes de una final. Veo a Lamine con los cascos en la Eurocopa...durmiéndose cuando jugaba la final, y yo no, yo pasaba unos nervios increíbles, te iba todo en esas finales", reconoció el bilbaíno.

Sobre la que ganó en 1990 con el Barcelona ante el Real Madrid, resaltó que se jugaban "la continuidad de un proyecto", que estaban siempre "con la soga al cuello", y que previamente tuvo "esa sensación de que ibas al baño 50 veces". "Estás en una nube de nerviosismo hasta que pita" el árbitro el comienzo del partido, apostilló.

Para Salinas, fue la final de Copa del Rey más especial. "En esa era actor principal, jugué y marqué, además veníamos de un Madrid de la Quinta del Buitre que había ganado cinco ligas seguidas y ese fue el hundimiento del Titanic", subrayó.

A partir de entonces "no levantaron cabeza y nosotros ganamos cuatro ligas", dijo, y añadió que "marcó un inicio de proyecto con una forma de juego diferente", pues de haber perdido "probablemente hubiesen echado a Johan Cruyff" del Barcelona.

A la pregunta de quién sería en la actual plantilla del Barcelona si aún fuese futbolista profesional, respondió: "Yo sería un Ferrán Torres, un jugador importantísimo que siempre que sale cumple, marca cuando sale del banquillo, siempre animado, colaborando...lo bueno de esta plantilla es que los de segunda línea marcan también, sin ellos sería imposible ganar".

La 🏆 pone rumbo a la final.@juliosalinas19 y @officialpepe, representantes históricos de los equipos finalistas, llevan el trofeo hasta Sevilla a bordo del tren AVE de @Renfe.

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— RFEF (@rfef) April 23, 2025