El Athletic ha entrado en el club de los selectos

-
Me hubiese gustado que, en la despedida hubiese estado Marcelo Bielsa
-
Está claro que el Athletic es cantera de jugadores y entrenadores
-
La conexión equipo-afición en el Athletic dispara los números de San Mamés
Llega el momento de hacer balance de fin de curso del equipo de Ernesto Valverde que, en mi opinión, es tremendamente positivo. En esta dura y larga prueba de selectividad el Athletic Club ha entrado, precisamente, en el club de los selectos. De los elegidos para jugar la UEFA Champions League la temporada que viene. Y si ya retienes la Copa de Sevilla hubiese sido el cum laude. Es cierto que hemos dejado pelos en la gatera, léase un título, pero es que hay que recordar que solo lo gana uno, así que eso ya habría sido de matrícula de honor si nos referimos al título europeo cuya final 'inglesa' se jugó en San Mamés.
Siempre podremos especular con la posibilidad de que el examen de semifinales europeas hubiese sido mejorable si se hubiese desarrollado en condiciones normales. O sea sin que nos incluyan un temario improvisado vía decisiones del juez del tribunal. ¿Qué hubiese pasado sin la expulsión rigurosa de Dani Vivian en San Mamés? ¿Y si se hubiese aplicado el mismo rasero en Old Trafford? En definitiva, en ambos casos, jugar once contra once hubiese sido más competitivo.

Es cierto que presentarnos a otra final europea en nuestra propia ciudad es muy difícil. Es prácticamente imposible que se conjuguen ambos supuestos, llegar a la final y que se celebre en Bilbao.
Por todo ello, me doy por satisfecho por lo conseguido, casi impensable al principio de la temporada y no entiendo ciertas críticas que se fijan más en lo perdido que en lo conseguido… ¿Qué queremos, un 100% de éxitos?
Y no me quiero olvidar del otro acontecimiento de esta temporada: el punto final deportivo de Oscar de Marcos que deja un hueco irrellenable en campo, en el vestuario y en nuestra sociedad.

Está claro que el Athletic es cantera de jugadores y de entrenadores...
Pero también es cantera de embajadores o representantes institucionales. Ahí están los Iríbar, Goikoetxea y antes Gurpegui. De Marcos, cuando descanse y cambie su deportivo chip, es primordial en ese puesto por valores Athletic y humanos en general. Discreto, pero ejemplo “a lo bajini”, no solo para los txabales, sino para todas las personas en general. Y porque el respeto que transmite es pura esencia vasca y Athletic.
Me hubiese gustado que, en su despedida hubiese estado Marcelo Bielsa, su valedor y el que nos hizo ver las otras cualidades de Oscar, mal que le pese al propio capitán: su gran categoría HUMANA.
¡Hasta pronto, Oscar!
. Por José Antonio Velilla Iriondo, Socio compromisario del Athletic Club