'Superoblak'
Iñaki Dufour,Madrid, 5 ene (EFE).- "Jan Oblak te hace ganar partidos", resumía Diego Simeone del portero esloveno, que se superó de nuevo a sí mismo cuando ya parece imposible con otra parada increíble, decisiva para salvar el triunfo del Atlético de Madrid, agarrado una vez más al valor incalculable de un guardameta para la historia del club.,No por habituales han dejado de causar sensación las irrupciones determinantes del cancerbero. En la última jugada del choque contra el Levante, con 2-1 e
Iñaki Dufour
Madrid, 5 ene .- "Jan Oblak te hace ganar partidos", resumía Diego Simeone del portero esloveno, que se superó de nuevo a sí mismo cuando ya parece imposible con otra parada increíble, decisiva para salvar el triunfo del Atlético de Madrid, agarrado una vez más al valor incalculable de un guardameta para la historia del club.
No por habituales han dejado de causar sensación las irrupciones determinantes del cancerbero. En la última jugada del choque contra el Levante, con 2-1 en el marcador, diez minutos después de haber frustrado al mismo rematador, Enis Bardhi, sacó una mano izquierda prodigiosa; una parada de "reflejos", según él, para sostener los tres puntos y el regreso al tercer puesto después de seis jornadas.
Ya ha ocurrido muchas veces. Sus intervenciones han sido al menos tan concluyentes para el equipo en el último lustro como lo fueron en el pasado los goles de Antoine Griezmann o como lo son los tantos ahora, por ejemplo, de Álvaro Morata, con siete dianas, o los dos de este sábado de Ángel Correa y Felipe Monteiro para ganar al Levante.
En concreto en esta temporada, hay ejemplos numerosos y variados. Para construir, sostener o remachar un triunfo o para retener un empate. Contra el Real Madrid, a Karim Benzema (0-0); frente al Celta, a Brais Méndez (0-0); ante el Lokomotiv, a Grzegorz Krychowiak (0-2); contra el Valencia (1-1), abajo a Dani Parejo; ante el Athletic, al inicio del duelo, con 0-0, a Íñigo Martínez (2-0) como también lo hizo ante Osasuna a Rubén García (2-0)...
Son 12 puntos en esta temporada de la Liga, de la que el Atlético ha sumado 35 en las primeras 19 jornadas, generados por el guardameta, con 12 tantos en contra y de nuevo en la carrera por ser el portero menos goleado del campeonato, como lo fue sin discusión en cada una de las cuatro últimas campañas del torneo español.
"Es el mejor portero del mundo", insistían en el Atlético al término del choque de este sábado contra el Levante. "Ese talento sale en los momentos decisivos", asumió Paco López, el técnico del conjunto valenciano, resignado ante la intervención de Oblak y frustrado por un punto que podía haber sido suyo sin esa parada.
Renovado el pasado mes de abril hasta 2023, él es una referencia y una base irrenunciable del pasado, el presente y el futuro del Atlético. Es el segundo capitán desde este curso. "Entendíamos que era un paso importante que merecía por su trabajo dentro del grupo y dentro del equipo y es un futbolista que no habla mucho, pero cuando habla es muy claro", repasó el pasado mes de octubre Diego Simeone.
Su ascendencia es indiscutible, su transcendencia es incalculable y sus números son incontestables desde su consolidación como titular en marzo de 2015. Su inicio en el club no fue fácil. Mermado por una lesión en la cadera, relegado a un segundo plano imprevisto, vivió los primeros meses en la suplencia. La titularidad era de Moyá.
Su debut fue con derrota, con un 3-2 contra el Olympiacos en la Liga de Campeones el 19 de septiembre de 2014. "Era un chico que llegaba nuevo, empezaba con el español y no lo controlaba como para poder comunicarme bien. Necesitaba más tiempo. Además, empezaba a escuchar las primeras dudas sobre mí. Me encontré un poco solo y triste, así que me dediqué a trabajar y a esperar mi oportunidad", contó Oblak recientemente en una entrevista al Club del Deportista.
Después le siguieron 232 partidos más, 233 en total con su estreno, con 155 goles en contra. 129 de sus choques con el Atlético, un 55 por ciento, los terminó imbatido, con todo lo que supone eso para cualquier equipo o cualquier adversario y para el número de derrotas de su conjunto: sólo 39 en esa cantidad de encuentros, un 16 por ciento. Cuatro corresponden a esta campaña.
Y nada más cuatro al Wanda Metropolitano, una fortaleza bajo su protección (allí ha jugado 61 partidos, de los que su equipo ganó 43, 19 por el margen de un gol, e igualó 14, con 41 duelos imbatido, un 67 por ciento, y 30 goles repartidos en 20 duelos) y el escenario de otra parada prodigiosa del "mejor portero del mundo": Jan Oblak.