2-0, Álex Fernández (min. 81)
3-2, Rubén Sobrino (min. 90+8)
2-2, Joao Félix (min. 88)
Victoria para demostrar que este Cádiz está muy vivo
El Cádiz CF ha confirmado que lo de Vallecas fue un accidente. Ha vuelto a mostrar su mejor versión y ha sido capaz de vencer al Atlético. Por un momento parecía que el pupas era el equipo amarillo por desperdiciar un 2-0 a falta de muy poco, pero finalmente un gol de Sobrino le dio sentido a todo.
Las cosas se pusieron muy de cara en el mismísimo arranca porque cuando no se había cumplido el primer minuto, Bongonda adelantó con un zurdazo a los amarillos a centro de Espino. Quedaba un mundo de partido y había que ver el plan de partido porque enfrenta estaba un rival que habitualmente no busca el gol a la desesperada, pero que en este caso no tenía más remedio que hacerlo.
Los de Simeone buscaban constantemente a Carrasco, quizá para hacer daño a Luis Hernández, un central jugando como lateral de manera accidental. Al Cádiz le duraba muy poco el balón, ya que no era capaz de romper líneas de la presión del rival y tenía que apostar demasiado por el pelotazo.
Álex Fernández tenía que bajar mucho para darle algo de sentido a la salida del balón. La buena noticia es que, pese a todo, el Atlético no había puesto en serios aprietos a Ledesma en los primeros 20 minutos. Los amarillos estaban compitiendo muy bien, incluso con problemas como la lesión de Momo al filo de la media hora.
Los amarillos estaban bien puestos en el campo y obligaban a su oponente a hacer lanzamientos lejanos o a apostar por centros laterales. La primera parte se estaba ejecutando casi a la perfección. Y pudo ser mejor si Sobrino hubiera aprovechado una clara ocasión al filo del descanso.
La segunda parte comenzó por los mismos derroteros. El Cádiz pisaba el área colchonera con cierta frecuencia y tenía que extremar las precauciones en defensa. Ledesma impidió el empate en una ocasión de Correa en el minuto 56. Para combatirlo, el equipo se permitía incluso alguna posesión larga.
Los dos entrenadores habían movido los banquillos y el Atlético ya tenía en el tramo final sobre el campo a Griezmann y a Joao Félix. Había que resistir los últimos minutos de acoso rojiblanco, aunque el equipo de Simeone seguían bien contenido por los amarillos.
El tiempo pasaba muy lentamente. El Cádiz tenía ante sí la posibilidad de dar un golpe tremendo, pero en el estadio nadie quería pecar de exceso de confianza. Pero todo se aclaró cuando Álex Fernández marcó el segundo a falta de diez minutos en una gran jugada colectiva.
Cuando todo parecía hecho, apareció la genialidad de Joao Félix y con él volvieron los fantasmas. Del 2-0 se pasó al 2-2 y ese punto sabía a muy poco. Pero el fútbol fue justo y le dio la victoria a los amarillos con un tanto de Rubén Sobrino en el minuto 98.
Ese Cádiz OE, GRANDE Cádiz