Leganés, el triunfo del trabajo y la humildad

El Leganés afrontará con ilusión y tranquilidad su estreno en la máxima categoría del fútbol español, a la que ha llegado por primera vez en su historia después de lograr dos ascensos en tres años.Carlos Mateos
Lo ha conseguido con un proyecto serio y solvente liderado por Asier Garitano. Discreto, modesto y con sentido del humor, el técnico que entrenó incluso al equipo de parados de la AFE ha contribuido al crecimiento del club no solo en la dirección, sino también en la confección de las plantillas.
El modelo ha funcionado hasta el momento y por eso no se espera un giro drástico en el mismo pese a la nueva realidad. Los blanquiazules mantienen un bloque semejante al del pasado curso y, a la espera de los posibles fichajes de última hora, no hay un gran número de caras nuevas. Al final, los movimientos estivales han ido bastante encaminados a la permanencia de algunos jugadores.
Es el caso de nombres como Unai Bustinza y Gabriel Pires, que han pasado de estar cedidos a pertenecer a la entidad madrileña. También continuará un año más a préstamo Pablo Insua, autor del gol del ascenso ante el Mirandés.
Todos ellos se integran en una plantilla a la que se han ido sumando efectivos en el trayecto desde la Segunda División B. De hecho, solo el defensa argentino Martín Mantovani y el centrocampista Alberto Martín sobreviven de aquella etapa.
En cuanto a los que se estrenan como blanquiazules, la mayoría son jóvenes en busca de oportunidades. Las buenas relaciones con clubes como el Athletic o el Juventus han permitido que firmen cedidos Unai López y Alberto Brignoli, el único que no sabe lo que es jugar en España.
Con esas mismas condiciones han llegado Rubén Pérez y Adrián Marín desde el Granada y el Villarreal, respectivamente. Para reforzar la posición de delantero centro, el elegido fue Miguel Ángel Guerrero, ex jugador del Sporting de Gijón, mientras que Carl Medjani aterriza procedente del Levante para aportar experiencia en la zaga.
Se espera de ellos que se adapten a un bloque caracterizado en temporadas precedentes por su gran capacidad para competir. Sólido en defensa y generoso en la presión, el trabajo sobre el verde no se negocia. Nadie tiene el puesto asegurado y los futbolistas saben que la relajación puede relegarles al banquillo.
En cuanto a las oficinas, la familia Moreno Pavón es la se sitúa al frente de la entidad, en la que ha realizado una gestión notable si se tiene en cuenta que cuando se hicieron cargo del Leganés atravesaba serios problemas económicos.
Se trata además de un equipo muy activo e ingenioso en las redes sociales y tradicionalmente volcado con iniciativas locales. Atraer a más gente a las gradas es uno de los objetivos pendientes, algo que se espera solucionar esta campaña. De hecho, se ha ampliado el aforo de 8.000 a 11.000 localidades.
Sin prisa pero sin pausa, los 'pepineros' han crecido desenfrenadamente hasta llegar a lo más alto. Ahora quieren disfrutar en la cima sin volverse locos pero con la ambición del que se encuentra ante la oportunidad de su vida.