El premio que se convirtió en castigo

Muchas miradas estaban puestas en el estreno como titular del canterano del Celta Pape Cheikh en Balaídos. Sin embargo, su debut desde el inicio no tuvo el eco esperado por la sorprendente decisión de Berizzo de colocarlo de lateral derecho, una posición desconocida para él.

 
Una vez conocida la alineación, todo el celtismo esperaba al senegalés ocupando el doble pivote junto a Pablo Hernández en el centro del campo. Al comenzar el partido, se vio a Pape en el costado derecho de la defensa y las aficionados se frotaban los ojos en la grada de Balaídos con lo que estaban viendo. En la cantera del Celta siempre jugó de centrocampista, más o menos adelantado, pero nunca como zaguero.
La prueba no salió mal, aunque tampoco el Almería exigió demasiado a los defensas del Celta. El improvisado lateral se incorporó al ataque con poco acierto, pero se le vio bastante activo en la presión y recuperó algún que otro balón. En la primera mitad recibió los aplausos de la afición tras hacer un sombrero a un contrario con un sutil control del esférico. Fue el mejor detalle individual del partido.
En el futuro sabremos si esta prueba del entrenador celeste fue por un día o se va a repetir en el futuro. El domingo contra el Granada puede que tenga una nueva oportunidad saliendo desde el banquillo.