De 68 a 54 millones: el recorte salarial con el que debe lidiar el Celta

La gravísima crisis económica que azota al mundo del fútbol provocada por el coronavirus ha 'cogido' al Celta de Vigo como uno de los equipos mejor preparados para afrontar las próximas campañas que estarán marcadas por la merma de ingresos. Con estadios vacíos, menos y peores patrocinios, o la reducción de los ingresos televisivos el negocio del fútbol se resiente. Por ello los clubes van a tener que realizar importantes ajustes en sus plantillas.

El caso del Celta no es distinto a pesar de su buena salud financiera. Este curso ingresó 106 millones de euros, pero para la temporada 2020/21 estima que los ingresos sean solo de 74 millones de euros, por ello deberá reducir su masa salarial de forma notable.

El club vigués ya ha establecido con LaLiga que su límite salarial para esta nueva campaña sea de unos 54 millones de euros, 14 menos de los 68 con los que contó en enero de 2020, cuando pidió ampliar su límite para afrontar las cesiones de Smolov, Murillo y Bradaric. Esto obligará al Celta a buscar la manera de recortar gastos en la plantilla y en los fichajes que pueda acometer.

Hasta el momento el Celta ha logrado la llegada de tres jugadores - Álvaro Vadillo, Renato Tapia y Miguel Baeza -. Los dos primeros han firmado tras acabar sus contratos con el Granada y el Feyenoord por lo que los vigueses no han pagado traspaso. En el caso de Miguel Baeza, el Celta se ha hecho con la mitad de sus derechos federativos por unos 2 millones de euros. El ex del Real Madrid Castilla es una apuesta de futuro con una ficha asequible para los parámetros en los que se maneja el Celta.

Los celestes aún necesitan firmar un central, un lateral izquierdo, otro centrocampista y un delantero. Pero para poder inscribirlos deben encontrar acomodo a varios jugadores. Juncà, Pione Sisto, Emre Mor, Jozabed, Juan Hernández, David Costas, Toro Fernández son los candidatos a salir cedidos o traspasados este curso.

Además el Celta pretende lograr una venta importante con Araujo u Okay Yokuslu pero es consciente de la enorme dificultad que entraña esta operación ante las enormes dificultades económicas que tienen el resto de clubes. Por ello fichajes como los de Jeison Murillo, Rafinha o Carlos Fernández, con traspasos superiores a los 10 millones de euros son operaciones muy complicadas en las que el Celta debe cuadrar unos números que en estos momentos no dan.

Por ello la dirección deportiva encabezada por Felipe Miñambres está buscando una salida a un número importante de jugadores, algunos de ellos con fichas muy altas como Pione Sisto o Emre Mor, con la que habilitar masa salarial para lograr la continuidad de Murillo o firmar a un delantero que acompañe a Iago Aspas y Santi Mina.