Lío en El Molinón, el Sporting-Albacete se detuvo por el lanzamiento de objetos

En el encuentro disputado este domingo entre el Sporting de Gijón y el Albacete no ha faltado la polémica arbitral, sobre todo al final del partido. En el tiempo añadido del duelo, el colegiado, que no ha pitado la finalización del mismo, ha mandado los jugadores al vestuario por lanzamiento de objetos.

En un primer momento, se desconocía el motivo de la detención del partido, puesto que en la megafonía de El Molinón no había comunicado ningún tipo de aviso.

Tras los primeros compases de desconcierto, el motivo por el que se había parado el partido era el lanzamiento de objetos en la celebración del segundo gol del Albacete, que había marcado Higinio de penalti.

Un tanto que llegó después de que el colegiado acudiera al VAR por segunda vez para revisar la acción. En esta jugada, Rubén Yáñez derribó a Higinio y fue expulsado porque el colegiado le mostró la segunda cartulina amarilla, por lo que Campuzano se puso de portero en el lanzamiento desde los once metros.

El colegiado mandó a los jugadores a los vestuarios cuando quedaban pocos instantes para que se cumpliera el tiempo añadido a esta segunda parte, que había sido inicialmente de ocho minutos.

Finalmente, Muresan Muresan reanudó el encuentro hasta que pitó el final ante el descontento de la afición del Sporting. El míster del conjunto rojiblanco, Rubén Albés, se mostró muy cabreado sobre el mismo césped por las decisiones que estaba tomando el árbitro.

En esta reanudación, hubo cambio de portero en el Sporting, puesto que en un primer momento fue Campuzano el que asumió la responsabilidad de sustituir a Rubén Yáñez tras ser expulsado, y tras el paso obligado por vestuarios antes de tiempo, fue Diego Sánchez el que se colocó bajo los palos de la meta rojiblanca.