

Dépor 0-0 Burgos: fútbol vistoso pero sin goles en el centenario de Yeremay

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Ocasiones claras para ambos equipos
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Zakaria Eddahchouri no teme al fichaje de otro '9' en el Dépor: "No será un problema"
El día que Yeremay Hernández cumplía 100 partidos como jugador del primer equipo del Deportivo de La Coruña no se pudo marchar a casa con una victoria. Los herculinos igualaron con el Burgos en un partido atractivo, que tuvo ocasiones para ambos bandos y en el que los blanquiazules llevaron la batuta. Sin embargo, faltaron los goles.
Después de su prometedor debut en Granada, el Dépor necesitaba dar un golpe de autoridad ante su afición. La pasada temporada fue el cuarto peor local de la categoría y ese registró mermó sus aspiraciones. Pero el estreno en casa no hizo más que aumentar la presión sobre el equipo. Pese a ello, cuatro puntos de seis posibles no es un mal botín para un bloque todavía en construcción.
Luis Miguel Ramis ha dotado a su equipo de una identidad muy reconocible. Es un bloque sólido, muy bien estructurado en línea defensiva. Ni en un escenario como Riazor se descompuso. Y eso que antes del primer cuarto de hora su rival ya había rozado el gol. Primero con una genialidad de Yeremay, que se encontró con el larguero al minuto de juego; después con un disparo desde la frontal del neerlandés Zakaria Eddahchouri que se marchó fuera por centímetros.
El Burgos creó dificultades al Dépor con su planteamiento. Al equipo de Antonio Hidalgo le faltó darle más ritmo a su juego para desarmar a un rival que no renunció al ataque cuando encontró espacios. Iván Morante enmudeció el templo deportivista con un zurdazo desde la frontal. Germán Parreño, que repitió titularidad, se lució con una espectacular estirada para evitar el 0-1.

Revolución en la segunda parte
El partido se revolucionó en el inicio del segundo tiempo. Ambos equipos pisaron el acelerador. El Burgos amenazó con un tiro de David González y, sobre todo, con un remate de Íñigo Córdoba tras otra gran acción de Fer Niño. El Dépor respondió con una falta lateral colgada por Luismi Cruz, a la que no llegó por poco José Gragera, y un disparo de Yeremay.
Antes de la hora de partido, Hidalgo movió ficha. Ximo Navarro sustituyó a Arnau Comas, que estaba amonestado. Ramis lo hizo poco después con la entrada de Iván Chapela. Al Dépor le faltaba energía, y su técnico la buscó con la entrada de David Mella y Charlie Patiño.
Con ambos sobre el césped, el equipo blanquiazul creció. Mario Soriano entró más en juego, y su equipo lo agradeció. Fue el peor momento del Burgos, incapaz de salir de su campo. Pero supo sufrir ante el empuje del rival, que dominó pero sin generar demasiado peligro para deshacer el empate.