Real Zaragoza 0 - 2 Deportivo: Mario Soriano y David Mella alargan la mala racha del Zaragoza en el Ibercaja
El Deportivo logró una victoria crucial en el Ibercaja Estadio frente al Real Zaragoza, imponiéndose por 2-0. Los goles de Mario Soriano y David Mella fueron suficientes para decantar el partido a favor de los gallegos, que supieron aprovechar los espacios en los contragolpes y mantener a raya al Zaragoza durante los 90 minutos, que confirma la mala racha del equipo de Rubén Selles.
El Deportivo aprovecha los contraataques
El Deportivo planteó un partido inteligente, basado en transiciones rápidas y presión alta en momentos clave. Yeremay Hernández fue determinante en la creación de juego, participando activamente en las acciones ofensivas y asistiendo a Mario Soriano en el primer gol. Esta acción llegó tras una falta botada con precisión que permitió a Soriano rematar desde fuera del área y colocar el balón en la escuadra derecha de la portería zaragocista.
😱 ¿Pero qué has hecho @mar10soriano?
🚀Un golazo del futbolista del @RCDeportivo abre el marcador en el #RealZaragozaDépor.#LALIGAHighlights | #LALIGAHYPERMOTION pic.twitter.com/bsE1gNC0wE
— LALIGA HYPERMOTION (@LaLiga2) November 2, 2025
La ventaja inicial dio tranquilidad al Deportivo, que continuó buscando el segundo tanto. David Mella culminó un contraataque con un disparo ajustado a la escuadra izquierda, sellando la victoria. Durante todo el encuentro, el Deportivo aprovechó las faltas recibidas para generar peligro, mientras que su defensa se mantuvo firme ante los intentos del Zaragoza de acercarse al área rival.
El Zaragoza intentaba reaccionar sin éxito
El Real Zaragoza buscó equilibrar el marcador con cambios ofensivos, destacando la entrada de Kenan Kodro y Samed Bazdar, pero se encontró con un Deportivo bien organizado y concentrado. Los intentos locales se vieron frenados por un sólido bloque defensivo y por múltiples remates que terminaron rechazados o desviados por la defensa y el portero visitante. Las faltas cometidas en zonas defensivas y la acumulación de saques de esquina reflejaron la dificultad del Zaragoza para generar peligro claro.