La llegada a Málaga menos cariñosa
Se ha dicho que Málaga siempre ha sido una plaza muy madridista históricamente, pero parece que esa pasión ha perdido algo de fuerza. O si no es así, sí que se ha ganado antipatías que quizá antes no eran tan exageradas. La llegada del Real Madrid a la capital de la Costa del Sol estuvo marcada por las alusiones a Mourinho. Entre algunas lindezas que le espetó más de un aficionado, también se pudo ver una pancarta con la leyenda "Mou, Málaga no olvida".
Eso sí, tampoco faltaron madridistas acérrimos hacinados en los alrededores del hotel Barceló locos (y locas) como quinceañeras esperando la llegada de Los Beatles por primera vez a España. Alrededor de 800.
Lo peor parte se la llevaron los periodistas gráficos que acudieron a la llegada de la expedición blanca para realizar su trabajo. Algunos de ellos se quejaron del trato recibido por la Policía y por miembros de seguridad que se encontraban en el cordón de seguridad cercano al hotel.