Tapia insiste en la malagueñización de la cantera

Antonio Tapia ha concedido una amplia entrevista a La Opinión de Málaga en la que ha repasado lo que espera de su proyecto al frente de La Academia. Tiene muy claros los conceptos y los objetivos que debe perseguir la cantera blanquiazul de aquí en adelante. Y concede capital importancia a la malagueñización del fútbol base del club. Tapia apuesta "por lo autóctono", por el futbolista malagueño por encima del resto.

"El mío es un modelo malagueño. Soy continuista de directores de cantera como por ejemplo Pepe Andrade, Antonio Benítez, Fernando Rosas, Pepe Sánchez, Manolo Martín o Manolo Navarrete. Estos técnicos ya demostraron que con el producto autóctono, jugadores básicamente de Málaga, fueron capaces de conseguir y promocionar a futbolistas de aquí en el primer equipo, incluso en bloque. En etapas anteriores, con el producto autóctono nuestro de Málaga, se han conseguido éxitos en la cantera, porque hemos sido campeones de España de juveniles también con chavales casi todos de Málaga, con Manolo Fernández de técnico. El filial ascendió de Segunda B a Segunda A y casi todos eran de Málaga. Entiendo que ese modelo es válido", explicó.
Eso sí, Tapia no cierra la puerta al jugador de fuera de Málaga, siempre y cuando sirva para aumentar el nivel de la cantera: "Lógicamente no vamos a ser provincianos. Y si no lo complementamos con jugadores de fuera, difícilmente vamos a competir con los grandes. No sería coherente ni lógico. Pero sí está claro que siempre Málaga y su provincia ha dado muy buenos jugadores. Desde mi punto de vista no existe un modelo único, al menos no rígido. El modelo de cantera se tiene que adaptar a las circunstancias y a los medios que uno tiene, a la situación económica, al modelo de juego del primer equipo, a las características de los técnicos".
El director de La Academia del Málaga cree que más de la mitad de los jugadores de la cantera deben ser de la casa: "Todo lo bueno que yo creo que me puede valer lo cojo y lo aprovecho. Hemos cambiado, en relación a la etapa anterior, los porcentajes de los jugadores autóctonos con los de fuera. La experiencia nos ha dicho que aquí hay mucho talento y lo que hay que hacer es darle la oportunidad. Entonces, en igualdad de condiciones, nosotros en este momento los porcentajes son muy desiguales. Queremos que un 50% de fuera y otro tanto de casa, o un 60% de casa podría ser razonable". 
Antonio Tapia también habló del despido de Manel Ruano al frente del equipo filial: "Manel tiene sus puntos de vista y no los voy a cambiar. Y yo tengo los míos y no me los va a cambiar. Entonces, al final lo más honesto para ambas partes es, en este caso, sustituirlo por un técnico que se ajuste más a mi filosofía. Sin querer decir que yo esté en lo cierto. Manel es un buen entrenador y un profesional. Pero hay filosofías diferentes, todas respetables, y si yo soy el director de la cantera las marcamos desde el club. Deben primar los criterios que entendemos nosotros que debe tener La Academia".
El ascenso del Atlético Malagueño es una prioridad para el club. Aunque no la única: "Si no ascendemos, algo no está funcionando. No es normal que en un club como el nuestro, con el presupuesto que manejamos, el equipo no consiga el ascenso. No voy a poner excusas en ese sentido. Fracasaríamos en el plano clasificatorio".
El descalabro de la primera plantilla acercará las realidades del primer y el segundo equipo del Málaga. Y eso puede tener, como consecuencia positiva, la proliferación de un mayor número de canteranos: "Históricamente, cuando el primer equipo no va bien, se abre una puerta a la cantera. Eso pasa en todos los clubes. La distancia se acorta. No es lo mismo competir en Primera que en Segunda. Entiendo que el hecho de que el primer equipo esté en Segunda va a permitir que algunos jugadores que no contaban en un principio para jugar en el primer equipo puedan tener cabida o una oportunidad".
En cuanto a su proyecto propiamente dicho, Tapia se da un plazo de varios años para que se haga una evaluación profunda de su trabajo al frente de La Academia: "Yo creo que en dos o tres temporadas el sello que queremos dar, entiendo que podría ser un momento para hacer una evaluación sobre lo que he aportado como director de cantera. De momento acabo de aterrizar como quien dice. Es un puesto difícil y complicado".