El punto de inflexión mallorquín
El análisis de la victoria del Málaga en Mallorca puede ser simplista. Si el postrero disparo balear en el descuento va dentro y no un metro desviado el regusto sería similar al de Gijón. Pero el triunfo resultó capital. Ya se ve la igualdad que hay. Cinco equipos metidos en tres puntos y el Cádiz que llega como un ciclón...
El Málaga pudo mantener el 1-2. Se ha hablado de la bisoñez de Diego González y Pau Torres, pero la pareja de centrales va acumulando minutos de vuelo a la espera del regreso de Luis Hernández o de algún fichaje invernal. Llevaba 4 puntos de 12 sin el madrileño el Málaga. Ahora, 7 de 15.
Y, aunque en el empate el balón cruzó dos veces el área, Diego y Pau solventaron varias situaciones delicadas. Muñiz les prefiere de momento a David Lombán, que salió en el descuento a reforzar la zaga.
Hay mucha dificultad para sacar resultados. Pierde el líder en casa, el Deportivo no puede con el Numancia... Los partidos se sacan a cuchillo. Una nueva jornada más pasa y sólo el Lugo venció por más de un gol de diferencia al Las Palmas (4-2). Cinco empates y cinco victorias por la mínima. Esta vez, con cuatro triunfos a domicilio.
Al Málaga le falta desequilibrio, acaso algo de velocidad. Ambas cosas las da Ontiveros, al que Muñiz le da un banquillazo cuando toca. Pero el marbellí no se despista, da la cara siempre. Acelerado, alguna vez individualista, pero siempre alborotador. Reacciona bien a las decisiones de Muñiz en el césped.
Se celebra también el partido de Dani Pacheco. Admitía él mismo que le hacía falta. Cuando se ganó la amarilla en el primer tiempo tras un disparo manso que propició una contra peligrosa alguno pensó en un cambio al descanso. El de Pizarra dio después sus mejores gotas de fútbol desde que llegó. 89 minutos, máximo minutaje de la temporada, que deben marcar un antes y un después.
Y, cómo no, Cifu. El más veterano en la zaga en varios partidos fue Ricca (nacido en 1994). Poco más de 23 años de media edad. El granadino da algo más de veteranía. Le falta campo y ese gol simboliza algo de lo que el Málaga no va falto, de corazón. Ha competido, ha ido por delante en Pamplona, Gijón y Coruña. No ganó en ninguno de los partidos, pero sí en Mallorca. Un punto de inflexión.