La malagueña Ana Mena sueña con llenar La Rosaleda y "colaborar con Iniesta o Ramos"
Hay varios artistas malagueños en el panorama nacional que han alcanzado grandes cuotas, pero en este 2020 hay una que se ha consagrado especialmente: Ana Mena. La autora de 'Se iluminaba', 'La pared' o 'A un paso de la luna', entre otros éxitos, se ha convertido en la cantante española más escuchada del presente año y tiene un sueño de lo más malaguista: quiere llenar el estadio de La Rosaleda, donde el Málaga CF juega sus partidos como local, en uno de sus conciertos.
La costasoleña, en una entrevista con Mundo Deportivo, confesaba que uno de sus mayores anhelos como artista es lograr que las gradas del estadio malaguista estén a rebosar durante una de sus actuaciones, algo que ya han conseguido antes otros artistas como Alejandro Sanz, Elton John, Lenny Kravitz, Estopa o Maná, entre muchos otros. Además, tiene muy claro con qué deportistas colaboraría en caso de que alguno se animara a hacer un tema con ella: Andrés Iniesta, Sergio Ramos, Rafa Nadal, Fernando Alonso o, por qué no, Neymar.
Esta joven de 23 años lleva desde los 8 o 9 dedicándose a la música, pero no ha sido hasta hace relativamente poco tiempo cuando ha logrado hacerse un hueco entre los artistas de más renombre de nuestro país. Ana Mena tiene dos referentes a los que ha conocido recientemente, como son Nek y Thalía. Con esta última ha llegado a compartir un tema. Considera que sus mayores críticos son sus fans: "Son los más críticos, pero a la vez los más constructivos", resaltaba.
Considera vital rodearse de gente real que te haga bajar a la Tierra cuando sea necesario: "A mi padre es a la primera persona que le enseño una canción". Pero no se olvida de sus amigos: Les monto en el coche y hacemos encuesta. Me gusta invitarles a cenar cuando llegan los éxitos".
Un 2020 diferente
Casi todo el mundo ha vivido el 2020 como un año bastante difícil, pero para Ana Mena ha sido muy fructífero en lo profesional. "Musicalmente ha sido un año muy bonito y en ese sentido sí que tengo que darle las gracias a la gente por haberme apoyado tanto. Nos hemos sentido identificados con esas canciones para sobreponernos a lo que estábamos viviendo", confesaba la artista malagueña.
Sin embargo, reconoce que "ha habido muchas cosas que no hemos podido hacer: nos ha faltado mucho el directo, los conciertos, el contacto con la gente".
Estuvo a muy poco de quedarse confinada en Italia cuando comenzó a despuntar la pandemia del coronavirus en el país transalpino. Pero logró escapar a tiempo y venirse a Málaga, donde pudo aprovechar para recuperar tiempo perdido con los suyos, algo que en su rutina de trabajo suele faltarle.
Todavía le quedan muchos sueños por cumplir, pero uno de ellos, el de llenar algún día La Rosaleda con su música, quizá llegue antes de lo esperado.