El Málaga presentará alegaciones por la roja a Luis Muñoz y las amarillas de Paulino y Dani Barrio

Las decisiones arbitrales de Iglesias Villanueva en el partido que enfrentó este sábado al Málaga CF y a la SD Eibar marcaron el devenir del duelo. Muchas de ellas provocaron un gran enfado entre el malaguismo, que se desahogó en redes sociales. Ahora, el club ha expresado su deseo de presentar alegaciones por tres de las amonestaciones del colegiado gallego, concretamente la tarjeta roja a Luis Muñoz y las amarillas a Paulino de la Fuente y Dani Barrio.

Según informa Diario SUR, desde la entidad de Martiricos entienden que estas cartulinas no deberían tenerse en cuenta, al haberse producido después de una de las jugadas que más polémica levantó. Fernando Llorente marcaba el 1-2 y gran parte del banquillo malaguista y de los jugadores de campo se acercaban al trencilla Iglesias Villanueva para quejarse por la acción anterior. Antes de que entrase en juego el VAR y el gallego tuviera que anular el tanto por una falta anterior del delantero navarro sobre Víctor Gómez.

En el acta arbitral, argumenta el colegiado que expulsa a Luis Muñoz por "levantarse del banquillo, yendo hacia la posición del cuarto árbitro con los brazos en alto y voz en grito protestando de forma ostensible una de mis decisiones". En cuanto a la amarilla a Dani Barrio, recalca un motivo similar pero sin hablar con el cuarto y sin mover los brazos. A Paulino le mostró la gualda por "derribar a un contrario en la disputa del balón de forma temeraria", pero esta falta se dio después de que Llorente abatiera a Víctor, por lo que el Málaga cree que no debería tener validez y así constará en sus alegaciones.

Una queja también por la atención a Venancio

Como apunta el medio anteriormente citado, el club de Martiricos añadirá una queja por la decisión de Iglesias Villanueva de que el rival Venancio fuese atendido de una contusión sangrante en la ceja dentro del terreno de juego. Transcurrieron unos cinco minutos con el partido completamente detenido, dejando al Málaga muy roto al no poder aprovechar su mejor momento del encuentro.

Pablo Guede, en sala de prensa, dejó claro que no entendió esa situación. Lo lógico habría sido que el jugador se retirase del césped para que los servicios médicos le taponaran el corte, aunque eso supusiera que el equipo blanquiazul disputara esos minutos en superioridad numérica.

Cabe recordar que el Málaga vio un total de siete amarillas y dos rojas directas, habiendo cometido 11 faltas en todo el partido. La multitud de polémicas arbitrales que se dieron en el choque ante el Eibar han dejado muy enfadada a la afición malaguista y también a la plantilla y a la entidad, según lo que se escuchó en la zona mixta y las alegaciones que va a presentar el club.