El gesto de Fede Valverde y la seriedad de Asencio resumen el sentir del Real Madrid tras el debut

El Real Madrid tropezó en su debut en el Mundial de Clubes ante el Al Hilal. Xabi Alonso no pudo empezar su etapa como entrenador blanco con una victoria, pese al penalti concedido a su equipo en el tiempo de descuento. Fede Valverde no acertó en el lanzamiento y condenó a los suyos a sumar solo un punto.

Lo cierto es que a nivel de juego el equipo blanco tampoco convenció. Los pocos días que ha tenido el tolosarra para inculcar su idea a los futbolistas no han sido suficientes.

Así lo reconoció Thibaut Courtois en la zona mixta al término del partido: "Xabi tiene su manera de jugar. Quiere defender de una manera y atacar de otra y es lo que tenemos que buscar y hacer. Hemos estado cuatro años con Ancelotti y tenemos otros automatismos. Es lo que tenemos que intentar cambiar, para hacer lo que quiere el míster de ahora, pero no es algo que en cuatro días salga directamente. Estamos viendo vídeos y hablando mucho, y yo creo que saldrá mejor".

Las caras de los jugadores al salir del Hard Rock Stadium

La cámara de ElDesmarque captó la salida de los futbolistas del Hard Rock Stadium, cuando caminaban hacia el autobús para regresar a su 'búnker' para descansar y comenzar a preparar el próximo partido.

La seriedad reinaba en el ambiente. Especialmente en dos jugadores: Raúl Asencio y Fede Valverde. El canterano fue uno de los primeros en abandonar el recinto y su gesto lo decía todo: el penalti que había cometido en la primera mitad había sido "un poco tonto", como bien definió Courtois.

Tras él desfiló el resto de la plantilla. Dani Carvajal respondía con un "muy bien" a Adri Fouz sobre su estado físico y Luka Modric se alegraba de la "gran ovación" que le había brindado el público asistente.

Pero el más buscado era el '8' merengue. Fede había fallado el penalti en los últimos minutos y sobre el terreno de juego ya se le vio afectado por el error. Xabi Alonso saltó al campo a consolarle rápidamente, pero al abandonar el Hard Rock Stadium seguía dándole vueltas a su disparo.

Con la mirada perdida, echándose la mano a la cara y muy, muy serio, Valverde se dirigió al autobús junto al resto de la plantilla blanca.