El Manchester United sigue en caída libre. El cambio de entrenador producido a finales de octubre, con el despido de Erik Ten Hag y la llegada dos jornadas después de Rúben Amorim, no consigue hacer efecto en un histórico del fútbol mundial que vive sus horas más bajas. Este domingo, volvió a perder. Otra vez en casa. Va 14º en la clasificación y los números del nuevo técnico en el campeonato doméstico ya son peores que su antecesor.
Amorim se muestra incapaz de levantar a un equipo que cayó 0-2 ante el Crystal Palace, con un doblete de Jean Philippe Mateta en una tarde complicada para Lisandro Martínez, lesionado de gravedad en una rodilla al final del encuentro. El equipo red está en tierra de nadie: a 12 puntos de Europa y 12 puntos sobre el descenso.
Ante el Palace, y tras varias decisiones polémicas en el mercado y en el once, los hombres dirigidos por Oliver Glasner fueron mejores. Por lo menos en el primer acto. Con un fútbol más vertical y con mucha más velocidad, probaron a André Onana en varias ocasiones. El descanso impulsó al United y Bruno Fernandes y Manuel Ugarte rozaron el gol, pero lo peor estaba por venir.
A falta de media hora para el final, una nueva muestra de la endeblez defensiva del Inited. Leny Yoro descuidó su marca en un lanzamiento de falta, Delacroix remató de cabeza al larguero y Mateta machacó en el rechace para subir el 0-1 al marcador y silenciar a Old Trafford.
La tarde se complicó para el United con la lesión de Lisandro Martínez, que clavó su rodilla derecha en el césped persiguiendo a Eberechi Eze. Salió en camilla y llorando cuando apenas quedaban ocho minutos para el final. El Crystal Palace acabó dando la puntilla a su rival sobre la bocina con el segundo tanto de Mateta.
Las sensaciones del equipo son pobres, los números son alarmantes y, para colmo, las estadísticas dejan a Rúben Amorim peor que a Ten Hag. Al menos de momento y en lo que a la Premier se refiere.
Despedido el 28 de octubre, Ten Hag firmó 11 puntos de 27 posibles en las nueve primeras jornadas del campeonato. O lo que es lo mismo: consiguió un 40% de los puntos. Dejó al equipo en 14ª posición, con los mismos puntos que el 13º.
Amorim, desde su llegada, empeora ese porcentaje. Lleva sólo 15 puntos de 39 posibles, lo que supone un pobre 38%. Y el equipo está prácticamente en la misma situación: 13º en la Premier, tan lejos de los puestos europeos como del descenso.
Lo único que está a favor de Amorim son los números en la Europa League, donde ha firmado un pleno de triunfos, mientras que Ten Hag sólo logró tres empates en tres encuentros.