Dejar salir antes que entrar

Como al resto de clubes, al Real Betis le está pasando cierta factura la compleja situación que atraviesa el fútbol. Las limitaciones con la economía y la inacción de la mayoría de equipos hace de este uno de los mercados de fichajes más parados que se recuerdan. La llegada del CVC ha permitido al club inscribir a sus nuevos refuerzos pero no da mucho más margen de maniobra para firmar. En Heliópolis tampoco están dispuestos a malvender a sus activos, ante la imposibilidad de encontrar recambios de garantías, y tampoco aparece ninguna oportunidad potable para mejorar la plantilla. Es por ello que, a día de hoy, en la dirección deportiva se prioriza las salidas antes de poder completar el plantel.

Cabe recordar que el Real Betis tiene actualmente el noveno límite salarial más alto de LaLiga. El 15% de esos casi 100 millones que obtiene del CVC se puede destinar al límite de plantilla deportiva, otro 15% a reducciones de deuda y luego el 70% es para un plan de inversiones. Eso no significa que el Betis pueda destinar los 15 millones de euros íntegros en la plantilla. Aunque el acuerdo con el CVC le permite inscribir a sus nuevos futbolistas, el club sigue estando obligado a vender para cuadrar su límite salarial. Además, debe liberar fichas para permitir la entrada de futbolistas.

Actualmente, y contando con los canteranos que se han asentado, el Real Betis tendría 28 futbolistas con ficha del primer equipo. Un hándicap que impiden maniobrar a la dirección deportiva.

"Nos queda un mes y medio que creo que va a ser muy divertido", advertía Antonio Cordón el pasado 20 de julio. En estas dos últimas semanas de mercado el director general deportivo afronta la complicada misión de apuntalar la retaguardia con el central deseado, manejando opciones como las de Lyanco o Luiz Felipe, y también tiene la alternativa de Benedetto para la delantera, aunque antes deberá salir algún activo.

A estas alturas la dirección deportiva se centra en agilizar la rampa de salida y encontrar acomodo a los que no cuentan para Pellegrini. Joel Robles contaba con una oferta del Lille, pero esa opción se ha desvanecido en las últimas horas. También tiene propuestas para salir Loren Morón, que gusta en equipos como Alavés, Celta o Valencia. Una tesitura más delicada la tienen Sidnei o William Carvalho, sin propuestas firmes. En cualquier caso, la solución del entuerto pasa por una venta importante aunque el Betis tampoco está dispuesto a malvender a ninguno de sus futbolistas y esperan pacientemente una oferta a la altura de sus pretensiones. Lo que sí está claro es que para firmar, antes deberá salir algún futbolista.