El campeón entra en escena sin fichajes

El Real Madrid, vigente campeón de LaLiga Santander, inicia su defensa del título entrando en escena en la segunda jornada con la siempre complicada visita al Reale Arena, en un duelo entre dos equipos mermados por las bajas que representa el primer capítulo del último reto de Zinedine Zidane, reeditar título liguero 32 años después y sin fichajes.

La puesta de largo del campeón no trae novedades en el nuevo curso. La expectación de otros años de ver a fichajes de relumbrón desaparece en tiempos de coronavirus y dificultades económicas. Ningún refuerzo para Zidane, más allá de los regresos de Lunin y Martin Odegaard, y los descartes de futbolistas que no entran en su libro de estilo como James Rodríguez o Gareth Bale. Estrellas en cualquier equipo pero inservibles en el Real Madrid.

Son las decisiones tomadas por Zidane que han permitido al Real Madrid sacar un buen puñado de euros por ventas y ahorrarlos en cesiones de jugadores de ficha tan alta como Bale. Junto al galés no contó el técnico francés con Achraf Hakimi, Sergio Reguilón, Dani Ceballos, Kubo, Reinier, Óscar Rodríguez, Brahim o James. Los títulos le avalan y ahora carga con decisiones tomadas sin que el club haya realizado ningún movimiento en el mercado.

La ilusión del madridismo solo puede recaer en el regreso ganado a pulso de Odegaard que podrá volver a jugar un partido oficial con el Real Madrid tras triunfar en sus cesiones y tras una temporada para enmarcar en la Real Sociedad. Arrastró molestias en pretemporada pero no se perderá un partido especial en un estadio donde siempre le estarán agradecidos por las tardes de buen fútbol.

Tiene complicado el asalto a la titularidad, pese a las bajas, con Zidane manejando la posibilidad de reforzar el centro del campo con cuatro, lo que daría entrada a Fede Valverde, o apostar por el tridente con sabor brasileño en bandas con la presencia de Vinícius y Rodrygo.

No tiene mucho para innovar ya que arranca la temporada sin Eden Hazard, Marco Asensio, Militao, Lucas Vázquez, Mariano Díaz ni Isco, que se recuperó a tiempo tras un esguince de tobillo pero llega sin ritmo de partido y no fue convocado. La noticia en la convocatoria es la presencia de Borja Mayoral que estaba en la rampa de salida y tiene opciones de quedarse más los canteranos Marvin y Arribas.

La Real Sociedad se verá obligada a reinventarse por las múltiples bajas con las que afronta su partido ante el Real Madrid, aunque con la intención firme de seguir su idilio de buenos resultados ante el conjunto blanco, una de sus víctimas preferidas desde 2019, ante el que ha ganado tres de los últimos cinco enfrentamientos.

Imanol Alguacil, técnico local, tiene una lista casi tan amplia de altas para este partido como de ausencias por unas lesiones que se están cebando en un centro del campo que se ha quedado con muy pocos efectivos. No estarán en este encuentro jugadores como Asier Illarramendi, Martin Zubimendi, Igor Zubeldia, Luca Sangalli, Jon Guridi y Martin Merquelanz, varios de ellos titulares en condiciones normales, pero el técnico de Orio puede salvar los muebles al contar con Ander Guevara, recuperado de una lesión que le ha impedido jugar tras el confinamiento y los amistosos de pretemporada.

La defensa tampoco se salva de las temidas lesiones y Zaldua está descartado, no así un Nacho Monreal que ha aparecido y desaparecido durante la semana de algunas sesiones de entrenamiento pero que, todo indica, podrá estar de titular en su banda. La delantera es la línea menos castigada ya que, si bien es cierto que William José queda fuera del equipo por la COVID-19, la Real cuenta con Ander Barrenetxea, Alex Isak, Mikel Oyarzábal, Alex Portu e incluso David Silva, quien entra en su primera convocatoria, eso sí todavía falto de rodaje y acoplamiento al sistema de juego blanquiazul. Su presencia tendrá, no obstante, un gran valor simbólico.

Los buenos resultados conseguidos en los últimos enfrentamientos ante el conjunto de Zinedine Zidane quiebran cuando se estudia la relación de partidos en San Sebastián, porque ahí sigue reinando un Real Madrid dominador ante una Real a la que ganó en 2020, 2017, 2016 y 2015.