Kylian Mbappé no está contento en el Paris Saint-Germain y su arrepentimiento es evidente. Desde que el francés declaró abiertamente en una carta no extender su contrato hasta 2025, el futbolista no ha dado síntoma alguno de ser feliz en el Parque de los Príncipes, un desamor que conoce el Real Madrid pero que Florentino Pérez no quiere darle mucha importancia o, al menos, hasta la fecha clave.
Aún se recuerda en Valdebebas el desplante histórico que hizo el parisino en mayo de 2022 en el que, con la oportunidad de ir gratis a Chamartín, se decantó por el dinero con una renovación que marcó un antes y un después en el club blanco. Un episodio que hace que la directiva merengue quiera ser cauta y no dar por logrado un fichaje hasta que el jugador estampe su firma en el contrato.
Sin embargo, esa famosa fotografía de Mbappé posando con la camiseta con el año 2025 parece ser la decisión que más atormenta al delantero en los últimos meses.
A pesar de fichajes de compatriotas como Ousmane Dembélé y Kolo Muani junto con la llegada de Luis Enrique, Kylian no ve el proyecto lo suficientemente competitivo para pelear la Champions League, una competición que se le escapa año a año mientras su competencia Erling Haaland ya tiene una en sus vitrinas.
En el último verano intentó presionar para que Al Khelaifi intentase venderle y dejar una buena imagen y recuerdo en la afición francesa, otra de sus múltiples preocupaciones. Sin embargo, la junta del PSG aguantó el pulso y sigue confiando en que terminará convenciendo al "7" de renovar con otra mejora sustancial de sueldo. Pese a ello, al exjugador del Mónaco no parece atraerle ya el dinero por delante de sus ambiciones deportivas.
A la vista de que Mbappé desea salir sí o sí en verano de 2024, el Real Madrid no quiere prestar atención al francés por el momento. El deseo por ficharle sigue existiendo para reforzar la delantera y jugadores como Jude Bellingham y Vinicius se han convertido en los más aclamados del Santiago Bernabéu.
Líderes en Liga y en el grupo de Champions, el club blanco no tiene ninguna prisa ni impaciencia en dejarse llevar por un anhelo que se remota desde hace un lustro. Ficharle a coste cero será vital para hacer la operación y tampoco quiere que se convierta de nuevo en un culebrón que condicione la planificación deportiva de cara a la próxima campaña.
Según informa Marca, el Real Madrid analizará y valorará todos los condicionantes y no moverá ficha hasta el próximo 1 de enero solo en caso de que haya viabilidad en el caso Mbappé. Poco más de dos meses en el que volverá la cuenta atrás para conocer que hará Kylian en una encrucijada que ya tuvo en 2022 y que, según sus gestos dentro y fuera del campo, podría tener un desenlace diferente. Aún así, con el PSG y este futbolista todo es posible.