La Real se jugará todo a una carta en el Wanda

La Real Sociedad se lo jugará todo a una carta en el Wanda Metropolitano contra  el Atlético de Madrid. La Real no pudo pasar del empate y termina sexta la jornada, pero sin la clasificación europea en el bolsillo. Se la jugará ante el Granada y Valencia. Hubo ocasiones en un partido en el que dominó el Sevilla, pero las oportunidades más claras fueron txuri urdin. La decisión final se hará esperar. Emociones fuertes para acabar LaLiga Santander.

Imanol Alguacil sorprendió de salida al apostar por un cambio de sistema y colocar una defensa de cinco frente a un Sevilla que se posicionó con un 4-3-3. La primera mitad fue bastante insulsa por parte de los dos equipos. A los porteros solo se les vio en los últimos minutos antes del descanso, y si bien el dominio fue de los hispalenses, apenas generaron ocasiones de gol. Tampoco la Real que preveía que iba a ser un partido largo.

En el segundo tiempo los  txuri urdin tuvieron más llegada, sobre todo con la presencia de Alexander Isak en el campo. Aunque el control continuaba siendo de los visitantes, las ocasiones fueron para los realistas que fallaron tres oportunidades clarísimas para abrir la lata y que podrían haber situado a los guipuzcoanos con la clasificación europea ya en su bolsillo, y con la tranquilidad de afrontar la última jornada con el objetivo cumplido. No pudo ser.

Algunos equipos se quedan ya fuera de la pelea, como el Athletic Club, pero habrá que competir contra Granada CF y Granada CF. Ante los ché el gol average está a favor de los realistas, pero no así ante los nazaríes. El domingo los corazones de los realzales se pondrán a prueba. Un punto podría ser suficiente siempre que el Granada no gane, pero una victoria mantendría a la Real en la sexta plaza y se evitarían previas. El domingo, el desenlace.

Sin apenas llegadas a las áreas

La Real Sociedad salió al partido con defensa de cinco, mientras que el Sevilla FC lo hizo con un 4-3-3. El encuentro tenía mucha intensidad de inicio pero no había ocasiones de peligro.

Con el planteamiento de uno y otro, el centro del campo de los hispalenses le estaba comiendo la tostada al de la Real, y eso motivaba que los de Lopetegui estuvieran generando más superioridades. Se intuía un partido largo, por lo que iba a ser fundamental  tener tranquilidad y paciencia.

Los visitantes forzaron su primer córner en el minuto 17 que se lanzó sin consecuencias, mientras que los txuri urdin no encontraban el camino hacia el gol, y además mostraban muchos problemas a la hora de sacar el balón jugado desde atrás. Estaba claro que pese a estar en juego la tercera y cuarta plaza, el Sevilla jugaba con la tranquilidad que da el saber que el objetivo, en este caso la clasificación de la Champions, ya se había conseguido.

En el 22' la Real botó el primer saque de esquina pero esta vez no hubo suerte con el balón parado. Los realistas tenían muchas dificultades para controlar la pelota. Los andaluces no habían generado ninguna ocasión clara, pero la sensación era que tenían el dominio el partido.

En el 35' hubo una ocasión buena para la Real con un balón que se paseó por el área, pero en la jugada Willian José estuvo lento. Había sido la mejor oportunidad en lo que se llevaba disputado de encuentro. Bono y Moyá estaban prácticamente inéditos, y es que no había habido ningún tiro entre los tres palos por parte de ningún equipo. La diferencia estaba en que la Real necesitaba ganar, tal vez un punto al final del partido en función de otros resultados no fuera malo, pero era mucho confiar. Los de Lopetegui no tenían esa necesidad y estaban muy cómodos.

Sin embargo el rumbo del partido pudo cambiar a falta de cuatro minutos para el final. Primero En-Nesyri la pegó de volea pero atrapó bien Moyá, y poco después Bono evitó el 1-0 tras un obús de Mikel Merino tras una mala salida de balón de Sergi Gómez, pero el zapatazo del navarro lo desvió el portero. Los dos guardametas, que apenas habían intervenido hasta entonces, fueron protagonistas de las últimas jugadas de la primera parte. Una lástima que el tanto de Merino no entrara, porque hubiera permitido encarar la segunda parte de forma muy diferente.

Con el 0-0 se llegó al descanso, tras una primera parte bastante insulsa, y en la que el Sevilla había dominado pero sin generar apenas ocasiones de peligro. La Real por su parte había encontrado muchas dificultades para llegar arriba, y se había topado con bastantes problemas para sacar el balón jugado desde atrás.

Posesión para el Sevilla, ocasiones para la Real

La segunda mitad arrancó con el mismo esquema, pero con un cambio de hombre por hombre. Nacho Monreal entró en lugar de Aihen Muñoz.

La primera oportunidad buena del segundo tiempo fue para los de Julen Lopetegui a los siete minutos de la reanudación en una recuperación de Suso en ataque, pero afortunadamente su remate cruzado no vio puerta. La Real estaba demasiado metida atrás en un partido en el que pasaba muy poco porque ningunos de los dos equipos tomaba apenas riesgos. 

Willian José botó una falta cerca de la frontal del área, pero su disparo pegó en la barrera. No había manera. Mientras tanto iban llegando goles poco a poco en el resto de partidos implicados en la pelea por Europa. La victoria sería una bendición pensando en la última jornada, pero por el momento el equipo estaba atascado.

Portu tuvo en sus botas el primer gol de la Real, pero su disparo se estrelló en el larguero después de una gran contra local. Parecía dentro, una lástima porque los guipuzcoanos no lo estaban pasando bien. Unos minutos después, Imanol Alguacil hizo el siguiente cambio en el 65 y dio entrada a Alexander Isak en lugar precisamente del murciano.

El Sevilla no hacía daño, pero tenía totalmente controlado el partido y generaba el nerviosismo de que en cualquier jugada podía hacer daño. Y encima para colmo la Real perdonó otras dos magníficas oportunidades que eran gol cantado. En el 70' Willian José disparó al muñeco en un mano a mano, y en una contra posterior de tres para dos, Isak no acertó con el pase a Oyarzabal y le dio tiempo al defensa visitante a despejar. ¡No se podía perdonar eso! Si encima que no había muchas oportunidades se perdonaban las pocas claras que había... una lástima.

El sueco botó una falta pero pegó en la barrera. En los últimos minutos la tendencia había cambiado un poco, y aunque el Sevilla seguía dominando, la Real era la que tenía las ocasiones. Quedaban doce minutos para el final más el descuento, y el choque pedía la presencia de Barrenetxea en el terreno de juego. Entró el donostiarra junto con Andoni Gorosabel. Quedaban nueve minutos...

Los locales no terminaban de encontrar la portería contraria, mientras que por el contrario Ocampos falló un gol clarísimo en el descuento, o más bien lo evitó Moyá que salió con decisión. No pudo ser y el partido llegó a su fin con 0-0 en el marcador.

Se avecina una última jornada plaga de nervios. La Real termina sexta con 55 puntos y adelante al Getafe para acabar sexta tras la jornada 37. Queda el último sprint.

Próxima jornada

La Real Sociedad jugará el domingo el último partido de la temporada 19-20. Será el correspondiente a la jornada 38 de LaLiga Santander y enfrentará a los txuri urdin con el Atlético de Madrid en el Wanda Metropolitano.

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