El empate sin goles entre Burgos y Real Sociedad B permitió a ambos equipos sumar puntos, pero dejando en los dos la insatisfacción de no poderse acercar a sus objetivos, el de los locales casi dejar certificada la permanencia y soñar con algo más, y el de los donostiarras agarrarse a mayores opciones de salvación.
Empezó avisando la Real con un centro, casi un disparo, de Sola al que respondió Caro al igual que poco después en un envió al área de Navarro que, tras golpear en Zabaco, se envenenó obligando al guardameta andaluz a despejar de manera apurada.
Pero los locales no tardarían en reaccionar, primero con un robo de balón de Juanma a Turrientes, para asistir a Pablo Valcarce que, con todo a su favor, envió rozando el palo con Zubiaurre ya batido.
En el minuto 12 un saque de esquina de Andy Ramírez fue controlado con el pecho por Mumo que se sacó un disparo que se coló en la portería, aunque el tanto fuera anulado al intentar el golpeo de espuela Guillermo Fernández en fuera de juego.
Sin embargo, pese a esta doble ocasión, el dominio del balón era casi en exclusiva para el conjunto txuri urdin que no dudaba en buscar el área rival frente a un equipo castellano agazapado esperando sorprender con alguna contra pero sin crear más peligro hasta el descanso.
Un despeje de cabeza de Fran García dejó solo a Pablo Valcarce, pero el delantero berciano no atinó en su remate, demasiado blando y desviado; todo en un partido que no acababa de romper hasta que puso el picante Beñat Turrientes con un trallazo desde fuera del área al que respondió Caro con una gran mano golpeando el balón finalmente el palo.
Esa pareció ser la señal de Julián Calero para mover el árbol e introducir tres cambios, Berjón, Raúl Navarro y Alex Alegría para refrescar su ataque y dar más consistencia al juego.
Precisamente una cabalgada del asturiano llevó el peligro con el envío al área tras recortar a un defensor, dejando pasar Valcarce para que Alegría se viera demasiado escorado y acabara buscando el centro al que llegó Zubiaurre.
Tras un remate de cabeza de Olasagasti, al que Caro respondió con reflejos, aunque el jugador estaba en fuera de juego, el partido pareció entrar en un toma y daca en cada portería al no darse por satisfechos con el punto ninguno de los dos equipos, aunque sin crear verdfadero peligro en ninguna de las dos porterías.