La afición que nunca falla

El fútbol es un deporte en el que el estado de ánimo es absolutamente volátil. De un día para otro puede cambiar todo y de la decepción es fácil pasar a la euforia. Un estado, cercano al de la euforia, es el que vive en estos momentos la afición del Real Zaragoza, después de ver a su equipo cosechar tres triunfos de forma consecutiva.

Algo que se pudo ver en el último encuentro, ante el Real Oviedo, en el que la grada de La Romareda se pobló hasta superar los 20.000 aficionados –20.607 según el dato oficial provisional–, con una afición, la blanquilla, dispuesta a llevar en volandas a su equipo hacia la victoria en el que se veía como un encuentro trascendental, vital para poder mirar decididamente a la parte alta de la clasificación.
Y es que la afición del Real Zaragoza no falla nunca, pese a todas las dificultades que se le han puesto en el camino durante las últimas temporadas, que pueden ir desde los horarios impuestos por LaLiga Santander hasta el rendimiento de su propio equipo, que dista mucho de una situación ideal. Pero como reza el mantra zaragocista, “Zaragoza nunca se rinde”. Eso lo saben bien unos aficionados que desde primera hora de la mañana de este lunes ya han comenzado a pensar en la siguiente cita, en Los Pajaritos de Soria. Por eso han podido verse largas colas a las puertas de las oficinas del club, lugar en el que se dispensan las seiscientas entradas de las que dispone el club para la cita frente al Numancia, un partido partido, en el que como siempre, el conjunto blanquillo estará bien acompañado.