Muchos kilómetros y pocos minutos para Papu

Una de las consecuencias de no formar parte de la élite del fútbol español es que la competición no para pese a los compromisos internacionales de sus jugadores. Es el caso del Real Zaragoza con Papunashvili, que durante la pasada semana ha estado concentrado con su selección, Georgia, ausentándose del partido de Oviedo.

El atacante blanquillo viajó hasta su país de origen para la disputa de los dos primeros encuentros de la Liga de Naciones en la última de sus cuatro categorías, la Liga D. Una competición en la que el equipo georgiano se encuentra en el mismo grupo, el 1, en el que también están las selecciones de Letonia, Kazajistán y Andorra. Siendo en esta ocasión el turno de enfrentarse a los dos primeros.

La exrepública soviética no pudo un mejor comienzo de competición. El conjunto dirigido por Vladimír Weiss viajó hasta Kazajistán, donde consiguió la primera de las dos victorias por 0-2, para posteriormente, de vuelta a Tiflis, ganar a la selección de Letonia por 1-0. Sería en el segundo de los dos encuentros en el que Papunashvili contaría con su oportunidad. El jugador blanquillo entró al campo en el minuto 85 de juego, disputando apenas diez incluyendo el añadido.

Miles de kilómetros de viaje

Un balance escaso para un Papu que todavía no se ha acabado de reponer de la lesión que le mantuvo apartado de los terrenos de juego durante la pretemporada y que también le hizo parar en la última semana a las órdenes de Imanol Idiakez. Así pues, más de 10.000 kilómetros de viaje acumulados para disputar apenas diez minutos de juego. Escaso balance para un Papu cuyo rendimiento está todavía lejos de lo mostrado la pasada temporada y que podría tener minutos de calidad en el encuentro de Copa frente al Deportivo de la Coruña, esta vez ya vistiendo la elástica del Real Zaragoza.