Álex Blanco, el chico que llegó a entrenar al lado de Messi

Hace ya más de una década que un niño con tal sólo 9 años acudía al estadio Rico Pérez, acompañado de su madre, para ver el partido de su padre, que jugaba en el Alicante. Aquel día se jugaba un Alicante-Real Zaragoza y ese niño quedó impactado al ver jugar a un delantero como Ewerthon, en ese partido el delantero brasileño dio un auténtico recital anotando dos goles. Pues aquel niño que quedaría marcado por ese partido jámas pensó que acabaría, algún día, vistiendo la camiseta de ese equipo, el Real Zaragoza. Ese niño era Álex Blanco, hijo de 'Tito' Blanco y actual jugador del conjunto zaragocista, que relata aquel partido en una entrevista concedida a Heraldo de Aragón.

Álejandro Blanco Sánchez nació un 16 de diciembre de 1998 en Albacete, a pesar de que en todos los sitios aparezca que nació en Benidorm (su ciudad natal), él futbolista recalca que fue en la ciudad manchega, donde dio a luz su madre. Álex siempre tuvo cerca una pelota de fútbol, ya que su padre cuando volvía de entrenar a casa le regalaba balones para que jugase. El fútbol corre por la sangre de Álex Blanco y ya desde muy chiquito demostraría su talento. Comenzaría dando sus primeros en Benidorm, en el equipo del colegio Lope de Vega, allí ya jugaba con chavales de dos años más que él.

El destino del jóven extremo siempre ha estado muy ligado al de su padre. Tito que fue futbolista profesional de muchos equipos como: Albacete, Alicante, Numancia, Extremadura, Jaén, Murcia o Levante entre otros se recorrió media España y jugó en muchos equipos por lo que la infancia de Álex siempre estuvo marcada por los equipos en los que jugaba su padre.

Alicante fue su primer destino. Empezó jugando en alevínes y tras dos años saltó a otro club valenciano llamado Kelme (Elche), tras este breve periplo el Valencia se fijaría en él y ya en infantiles se haría con sus servicios. Álex Blanco recuerda en una entrevista del club, que le costó su primer año allí porque "tenía talento y calidad, pero me faltaba un puntito de físico y agresividad que si que adquirí allí".

Entrenar con Messi, al alcance de muy pocos

"Estuve tres años hasta cadete A y firmé por el Barça. Me fui a la Masia y esto me marcó bastante, esos dos años allí estuve genial conocí a gente espléndida", explica el extremo zurdo.

En la cantera azulgrana coincidió con futbolistas como Cucurrella, Aleña o Carles Pérez. Ahora todos ellos están jugando en Primera división, cosa que ansia Álex. Pero sin duda con el futbolista más importante con el que tuvo el gusto de coincidir fue con Leo Messi, ya que como juvenil del Barça fue elegido para realizar un entrenamiento con el primer equipo y es algo que nunca va a olvidar.

Valencia, Alavés y su debut en La Romareda y en el Bernabeú

"Tras estos dos años volví a firmar por el Valencia, el último año de juvenil ya con un puntito de madurez al haber estado mucho tiempo fuera. Y ya al año siguiente estuve en el filial", añade.

Tras esta buena temporada en el filial hizo la pretemporada pasada con el Valencia de Marcelino y se quedó hasta enero, debutando con el primer equipo, en anda más y nada menos que en el La Romareda frente al CD Ebro en Copa del Rey. En el pasado mercado invernal fue cedido al Alavés hasta final de temporada y allí no tuvo la suerte de jugar muchos minutos, pero si debutar de nuevo, en un campo mítico del fútbol español. Álex Blanco debutó en Primera división en el Santiago Bernabéu, cosa de las que pocos pueden presumir.

Su padre, su fiel consejero

"Mi padre siempre está encima de mí, siempre me está dando consejos. Y yo los cojo todos, intento hacerle caso… en el tema del fútbol, en otros no le hago demasiado", subraya Álex Blanco en la entrevista de Heraldo.

Sus estudios para ser entrenador

A pesar de que dejó los estudios en Bachiller, porque se le hacía complejo comaginarlo con el fútbol. Actualmente está haciendo el segundo de entrenador para algún día poder ejercer y dedicarse a ello. Por último se define como un chico simpático, majo, alegre y que siempre intenta estar con una sonrisa en la cara