Cani: "Marcelino me puteó en el Villarreal; me hizo 'bullying', por así decirlo"

Cuando Marcelino García Toral se hizo cargo del banquillo del Real Zaragoza corría el año 2008. Por aquel entonces, Cani ya se había marchado al Villarreal CF. Lo hizo dos temporadas antes y en el conjunto castellonense se mantuvo hasta el mercado invernal de 2015. Su salida estuvo marcada por sus desencuentros con el técnico de Villaviciosa, que tras abandonar La Romareda, previo paso por el Racing de Santander y el Sevilla, se hizo cargo del cuadro groguet.

Marcelino llegó al Villarreal en enero 2013, con Cani como uno de los destacados de un equipo que luchaba por volver a LaLiga Santander. El zaragozano fue una pieza importante en el ascenso y comenzó siéndolo la temporada siguiente en la máxima categoría, pero entonces la relación entre entrenador y futbolista cogió un camino del que no se pudo regresar. Así lo explica el propio Cani en una entrevista en el canal de YouTube 'Ídolos'.

"Cuando llega Marcelino es una pasada porque exige, pero cuando pasa el primer año de su llegada es muy desconfiado y muy controlador. Me pidió que jugara cuando no estaba recuperado de la lesión y recaí. Fueron pasando los meses y seguía sin poder jugar bien. Me empieza a putear. Me hacía ir a los entrenamientos por las tardes a la ciudad deportiva. Yo estoy ya muy cabreado, no le aguanto más y en una reunión de capitanes me levanté y le empecé a gritar. Me destituyó de capitán y le dije que me daba igual porque no le aguantaba más", comienza relatando Cani.

"Me estaba haciendo, como quien dice, bullying en el colegio. Que no era eso, ni mucho menos, pero para que me entendáis. Tomé la decisión de que no quería seguir con él porque me estaba haciendo infeliz. Sin forzar lo que pasó, yo le empecé un poco a gritar, tuvimos una discusión muy grande delante de todos, incluso nos separaron y ya de ahí al día siguiente me puse a entrenar solo", añadía el ex del Real Zaragoza.