Víctor Valdés ya tiene que resolver su primer lío en el vestuario del Real Ávila, todo ello mientras los abulenses pelean en los playoffs de ascenso a Primera Federación contra el Cacereño. El exportero aterrizó en el club a finales del mes de abril con una misión: deshacerse de los malos resultados cosechados en el tramo final de temporada y colarse precisamente en los puestos de promoción.
Tomó decisiones contundentes, como mandar a la grada a Mario Rivas, el delantero que había sido titular indiscutible durante el 'mandato' de Miguel de la Fuente. Esto ha desatado un clima de tensión con el delantero, que incluso se llevó el dedo a la boca para celebrar el primer gol desde su llegada.
Mario Rivas suma 13 goles en esta temporada como delantero del Real Ávila, una cuenta que se frenó en seco cuando llegó Víctor Valdés. El técnico decidió sentarlo, dando la oportunidad a Bashiru. Esto no sentó de la mejor manera a Mario, que utilizó un encuentro clave (el primero que jugaba desde la llegada de Víctor Valdés) para el equipo para mandar un mensaje al cuerpo técnico y a la directiva.
Entró en el partido de ida de los playoffs en el minuto 77, con el marcador empatado a cero. Tras ver cómo su compañero Safrai abría la lata en el minuto 77, el albaceteño anotó el segundo gol del encuentro en el descuento. Lo celebró mandando callar, un gesto que repitió en la celebración privada en el vestuario.
El 2-0 de Mario Rivas, visto desde el banquillo con Víctor Valdés. Nos queda la vuelta. #SegundaFederación #VamosRealÁvila pic.twitter.com/RzkHAT4dhK
— E (@3ric_Capelo) May 11, 2025
La afición del Cacereño creyó que este gesto iba dirigido a ellos y le pitaron, pero el mismo jugador escribió a una cuenta de fans del equipo extremeño para explicarse. A pesar de que en el mensaje compartido en 'X' aparecen algunas frases tachadas, se puede ver cómo explica que mandaba callar al director deportivo, Joan Farias, y el entrenador, Víctor Valdés, "por cómo me están tratando" y porque "ha dicho palabras muy feas hacia mi persona", refiriéndose al directivo del cuadro encarnado.
Además de las disculpas privadas a los hinchas rivales, el delantero dejó en su perfil otro mensaje público. "Pido disculpas por el mal entendido, en ningún momento quise hacer callar a la afición del Cacereño, simplemente fue un gesto por un motivo personal a una situación ilógica que estoy viviendo… Mi más profundo respeto a la afición del Cacereño…", escribía.
Unos días después rescató unas declaraciones que dio a Diario de Ávila en las que reconocía su emoción al escuchar al público corear su nombre cuando saltó a calentar a la banda del Adolfo Suárez.
"El sábado sentí una sensación que nunca antes había sentido muchas gracias por el apoyo de verdad sois los mejores, juntos lo conseguiremos", comentaba en un mensaje de ánimo a la afición.
El sábado sentí una sensación que nunca antes había sentido muchas gracias por el apoyo de verdad sois los mejores, juntos lo conseguiremos ❤️💙⚽️ https://t.co/kZsSGfOW3W
— Mario Rivas Viondi (@MRivas_9) May 12, 2025