Emery y su teoría sobre los insultos en la grada
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El entrenador del Sevilla FC, Unai Emery, ha salido en defensa de su afición tras la denuncia de la LFP por los insultos vertidos contra el Málaga el pasado domingo en el Sánchez Pizjuán. Hay que recordar que el máximo organismo del fútbol español denunció a los seguidores rojiblancos por cantar "puta Málaga" en diversos momentos del choque, e incluso antes del mismo. Este jueves, el escrito pasará al Comité Antiviolencia. El entrenador sevillista, sin embargo, cree que hay que contextualizar lo acontecido, y sobre todo, no cree que la afición nervionense sea irrespetuosa.
"Yo creo que la afición del Sevilla está muy por encima de un hecho puntual. El respeto hay que implantarlo, y es un proceso. Creo que la afición del Sevilla tiene ese respeto. Los cánticos siempre los habrá en el estadio, pero no es una alusión real. Es en un contexto muy determinado. Si en el campo a mí me llaman hijo de... no lo recibo como tal, lo contextualizo. Es verdad que es mejor no hacerlo, porque nos llevaría al máximo respeto en el deporte, pero en el contexto es mensaje es diferente a como suena. Pero si es verdad que tenemos que intentar todos no utilizarlo ni en ese contexto. Estoy convencido de que esa reconversión moral la iremos logrando".
Así, el preparador vasco se coloca en el lado del sevillismo, mostrando su disconformidad con la posible sanción que pueda recibir el Sevilla. Precisamente una grada que volvió a corear su nombre por segundo partido consecutivo: "Yo tengo un sentido de la responsabilidad muy alta. Y cuando tengo el apoyo del club o del entorno del Pizjuán, que es nuestro templo, si cabe mayor responsabilidad me genera. Por eso digo que tengo que saber digerir los momentos malos, como sé digerir los buenos. Hago un total equilibrio y no bajar las intensidades donde manejamos nuestro día a día. He sentido mayor responsabilidad. No me gusta que me vean contento, porque algunos se pueden aprovechar".