El filial no funciona
El Sporting de Gijón B no ha pasado del empate (2-2) ante el Gernika este sábado en Mareo. Como en las últimas semanas, a los de Isma Piñera se les ha atragantado un rival en la zona de descenso a Tercera división. El filial remontó el gol inicial adverso, pero el error de Christian Joel terminó evitando lo que hubiese sido una victoria importante. Sobre todo, y al margen de la clasificación, para alejar la sensación de vacío que ha dejado José Alberto.
El conjunto de Mareo comenzó mucho mejor que su rival. Con un par de llegadas de Morilla y otra de Neftali, aunque pronto se llevó el primer varapalo. Pedro Díaz caía derribado y lesionado en el robo de un balón. Una falta que ejecutó Neftali para asombro de muchos. Alta, muy alta. El delantero no tuvo su mejor día. Tampoco, aunque en menor medida, Ramón Riego, quien sin querer introdujo el balón en su propia portería. El tanto del Gernika, en prácticamente su primera llegada, bloqueó al filial.
Y, ya en la segunda parte, pudo ser peor si el conjunto visitante no hubiese perdonado el segundo en un par de ocasiones. Lo aprovechó el Sporting para empatar por medio de Iván Elena. Además, minutos después, Garci estuvo listo para hacer el segundo. Una remontada que se vino abajo con la igualada del Gernika, de saque de esquina directo. Se la comió Christian Joel, que pagó aún más caro su error por el cabezazo desviado de Iván Elena que por poco no supuso el 3-2.