El último Málaga-Sporting: un partido accidentado del que aprender
El Sporting de Gijón viaja a Málaga CF para disputar el partido correspondiente a la octava jornada de la LaLiga SmartBank. El conjunto asturiano llega en un momento delicado, con la necesidad de conseguir la victoria de una vez por todas. La cita se antoja complicada ante un rival y un escenario que el Sporting conoce perfectamente. La temporada pasada ambos equipos vivieron un partido accidentado donde pasaron muchas cosas durante los 90 minutos.
Un empate con emoción
En la jornada 32, de la pasada campaña, ambos equipos se veían las caras en La Rosaleda. Los malagueños se encontraban en puestos de play off por el ascenso, mientras que los de José Alberto querían seguir con su buena dinámica y acercarse a dichas posiciones de play off.
Aquel duelo comenzó con un penalti a favor del Sporting que transformó Uros Djurdjevic para adelantar a los suyos a los vente minutos de partido. Los rojiblancos se adelantaban en un partido vibrante con dos equipos que necesitaban sumar para seguir con sus aspiraciones. Los asturianos se quedaban con un hombre menos sobre el campo debido a la expulsión de Pablo Pérez cuando todavía quedaban más de 20 minutos por jugarse.
Poco duro la inferioridad numérica rojiblanca en el encuentro. A los cinco minutos de la expulsión de Pablo Pérez, el Málaga se quedaba también con 10 hombres sobre el verde. Diego González abandonaba el choque, lo que dejaba a cada equipo con un futbolista menos.
Con las fuerzas igualadas el Málaga buscó el empate y acabó alcanzando el gol que necesitaba para equilibrar el resultado. Leschuk anotaba el gol para los andaluces en el minuto 82. No se movería más el electrónico. Todo terminó con un reparto de puntos que permitía a cada equipo seguir sumando para cumplir con sus respectivos objetivos.
Duelo de altura
El Sporting sabe que el rival exigirá un gran esfuerzo, pese a que el conjunto que dirige Víctor Sánchez Del Olmo no atraviesa por un buen momento de resultados, todavía no saben lo que es ganar en casa. El Málaga tratará de hacerse fuerte al jugar ante su afición para darle la vuelta a las cosas. El Sporting tendrá en mente el partido accidentado de la pasada edición para aprender de los errores cometidos en aquel entonces y lograr la segunda victoria de la temporada, esa que tanto se le resiste a los de José Alberto.