Albiol le da largas al Nápoles

El defensa valenciano quiere regresar a casa y jugar en el Valencia CF la próxima temporada. Pero delante tiene un hueso duro de roer porque el Nápoles sigue sin ceder y el club italiano está intentando persuadir a Raúl Albiol para que se quede en Italia y acepte la oferta para renovar su contrato que tiene encima de la mesa desde hace unas semanas. Ni todo el dinero del mundo puede con las ganas de Albiol con volver a vestir la camiseta ché y regresar a LaLiga Santander.

 
"No hay ninguna novedad en las renovaciones de Albiol. Por ahora todo está en stand by. A la espera"El representante del central valenciano, Manuel García Quilón, ha destacado en declaraciones al portal de internet Tuttomercato que todo sigue igual y que está parado, ya que el Nápoles está bloqueando y congelando toda negociación. La situación sigue parada. "No hay ninguna novedad en las renovaciones de Albiol. Por ahora todo está en stand by. A la espera", comentaba.
Lo que parece claro es que el presidente del Nápoles, De Laurentiis, no va a dejarlo salir, no va a facilitar su salida y si el Valencia lo quiere deberá hacer un esfuerzo por su ex futbolista. Ya lo dijo semanas atrás, que su precio es de 15 millones y no aceptará nada por debajo de ese precio. De este modo, queda claro que el conjunto partenopeo dejaría salir a su central titular si un equipo pagara ese precio. "El Valencia quiere ofrecer 6 millones por Albiol y no podrá ficharlo por menos de 15 millones. Por 6, 7 u 8 millones no puedo comprar un sustituto de Albiol", declaró el presidente del Nápoles.
Entre tanto, Raúl Albiol se ha cansado de esperar que sean otros los que resuelvan su fichaje y ha tomado las riendas de las negociaciones, dando un golpe de efecto a la situación. Y es que el defensa español se reunió con Aurelio De Laurentiis para transmitirle personalmente su deseo de abandonar el Nápoles este verano para fichar por el Valencia CF, según ha informado Sky Sports Italia. El zaguero ha alegado "razones personales" para justificar su necesidad de abandonar San Paolo y mudarse a Mestalla.