Ponga un Cavani y un Gattuso en su vida

Cavani ha desatado la locura en el Valencia. Hasta el más frío y sesudo de los analistas se deshace pensando en otro Matador en Mestalla. No hay más que escuchar a Gattuso para entender que a todos nos ilusiona a Cavani. Muy gracioso el técnico cuando confesaba que vivir un año en Valencia es como la vida de los perros que equivale a siete años.

Parece que el acuerdo está cerca pero, pase lo que pase con Cavani ya habrá merecido la pena. Obviamente prefiero que el Valencia CF lo fiche, pero también entenderé que el tipo no acepte la oferta y se vaya. De hecho, hace dos días o tres me huele que está mercadeando con el club y con otros para subastarse al mejor postor. Y es lícito, pero también hay que decirlo.

De todas formas, a Cavani se lo perdonamos casi todo ¿verdad? No ha habido en años, décadas diría yo, un nombre tan impactante que haya sido relacionado con el Valencia en el mercado. Futbolistas grandes, de su nivel, o que han sido top mundiales sí han pasado por aquí. "Fill meu en Mestalla hem vist cabalcar els mes grans..." (Hijo mío en Mestalla hemos visto cabalgar a los más grandes), que canta Tardor 

Ahora bien, que el club pueda fichar a uno de los cinco o seis máximos goleadores del mundo, no recuerdo yo esa posibilidad desde hace muchísimo tiempo. Es justicia poética, otro Matador, de larga cabellera, surcando el viejo coliseo en su centenario... Hágase. Pongan un Cavani en nuestras vidas. Sólo la posibilidad de su fichaje ha disparado la ilusión del valencianismo hasta cotas insospechadas, aunque sepamos que tiene 35 años; que su prioridad es llegar bien a Qatar, que el año pasado jugó poco por las lesiones y que es un vicio caro. Pero, dénselo a la gente señores de Meriton -si Cavani quiere, claro- porque el deporte que conocí es eso, es ilusión.

Es justicia poética, otro Matador, de larga cabellera, surcando el viejo coliseo en su centenario... Hágase.

El deporte es padres del equipo de fútbol de tu hijo que te preguntan si va a venir; es acalorados debates sobre si llegará en condiciones o viene a sestear; es preguntarse si está al nivel, por encima, o por debajo de los Kempes, Villa, Piojo y demás. El deporte es esperara a ver si lo fichan para ponerte su nombre en la camiseta... Es ilusión, sentido de pertenencia y aspiración de poder reverdecer viejos laureles y Cavani es todo eso.

Cavani y el reverso de Maxi Gómez

Del tema de Cavani me preocupan dos cosas: que podamos asumir que al final no viniera aunque parece que está todo muy bien encaminado y tengan plan B como dicen que tienen, y sobre todo qué puede pasar con Maxi Gómez si no sale. A mí Maxi me parece un jugador que está lejos de su mejor momento pero con cualidades más que interesantes para ser el 9 del Valencia. ¿Se imaginan que finalmente no viniera Cavani y la afición, que es soberana, le señala como culpable? El año iba a ser de aúpa. Todos, llegados a este punto creo que tenemos claro que es mejor perder que más perder y se le debe buscar salida. Pero mi duda es ¿él lo tiene claro? Si no es así, el problema será mayúsculo y sólo se cura con goles.

Porque al final, Cavani, Maxi, usted, yo, el Valencia, todo converge en un punto, en el partido del domingo, que tu estrella haga goles y que tu equipo gane, pero también si podemos disfrutar el proceso con ilusión, pues eso que nos llevamos, que al final la vida son dos días y ya nos hemos chupado uno. Feliz semana, que en esta ocasión empieza con partidazo. Ya lo explicaba Gattuso en sala de prensa: ser entrenador mola pero luego llegan los partidos... y el de este lunes ante el Atlético es uno de los grandes. Nos vemos en el templo.

David Torres

Delegado de ElDesmarque en València

dtorres@eldesmarque.com